ESCUELA DE CALOR CON AMANTIS
Manual para que la pandemia no te impida disfrutar del sexo
- La distancia social que impone las medidas contra la covid puede ser una buena oportunidad para el autoplacer o para probar vibradores que se activan a distancia
- Posturas como el “perrito” o la “cucharita” son las más recomendadas si quiere evitarse el cara a cara
- Es el momento del erotismo y de explorar más allá de la penetración, recuperando el sexo telefónico o el sexting
Probar a explorar más allá del coito, explotar nuestro potencial sensual o sumergirnos en el autoplacer a través de la masturbación. Las medidas de precaución que impone la covid-19 han obligado a cambiar hábitos también en el sexo, pero puede ser una oportunidad para romper la rutina en la cama. La distancia social nos puede acercar a nuevos juegos sexuales, a probar aquello que nunca nos habíamos atrevido o a juguetes sexuales que se controlan desde una aplicación o con un mando a distancia. Consultamos Esperanza Gil, sexóloga y responsable de la tienda erótica amantis Russafa, en Valencia sobre cómo afrontar el sexo en plena pandemia.
Aunque a priori parezca una contradicción, la experta cree que la distancia social puede acercarnos a “una sexualidad más variada” que no esté centrada en la penetración. Esto pasa por entregarnos al autoconocimiento a través de la masturbación o “volver a erotizar prácticas sexuales esenciales que creíamos aburridas o poco interesantes”. Además, vuelve a poner en el centro la importancia de la higiene (también) en la cama y el uso del preservativo.
Si el virus impone renunciar al cara a cara, algunos juegos de BDSM, el sexo anal, el sexting, el sexo telefónico o los juguetes que se controlan remotamente con un mando a distancia pueden ser buenos aliados. “Las posturas de espaldas como la “cucharita” o el “perrito” serían las más utilizadas para minimizar riesgos”, explica la experta, que ofrece otra idea al lector: “Practicar la masturbación delante de la pareja e incorporar nuevos juegos como los que nos ofrece la juguetería erótica”.
Si eres de los que prefieres no arriesgar y quedarte en casa, no tienes que renunciar sexo. “Se pueden adquirir juguetes con aplicaciones móviles que pueden usarse a mucha distancia, incluso entre personas que viven a kilómetros de distancia, como Lush 2.0. o Ditto de We-vibe”, recuerda la experta.
No todo es penetración: bienvenida seducción
El confinamiento y la distancia social han traído nuevas maneras de seducir menos inmediatas. También en redes sociales como Tinder o Happn. “Se está ampliando el tiempo dedicado a conocer a la persona, a hablar y realizar otras actividades que posponen el primer encuentro sexual”, explica la experta. La situación obliga a quedarse en casa y evitar el contacto social, pero la cara b de esta circunstancia es tener más tiempo para nosotras mismas. “Muchas personas se han tomado este tiempo para el autoconocimiento y para volver a conectar con sus propios deseos de forma que seguramente vayan a disfrutar mucho más de sus encuentros compartidos cuando se sientan preparadas para ello”, asegura la experta.
Teniendo en cuenta que el virus se transmite por las gotas que pueden expandirse al hablar, respirar o gemir. Sería recomendable incorporar la mascarilla también en el sexo, como hacemos en el resto de nuestra vida. Por tanto, nada de besos, hay que lavarse las manos (mejor que usar gel hidroalcohólico) e intercambiar teléfonos por si en los días posteriores aparecen síntomas de covid.
Distancia social, cercanía sexual
La experta recomienda aprovechar para probar juguetes que pueden ser accionados a distancia: “Esto incluye poder activarlos, desactivarlos, así como variar la intensidad y los diferentes ritmos de vibración que ofrezca”. Por ello, sugiere estimuladores de vulva, como Vulvanic, un vibrador confeccionado en silicona muy suave y que ofrece unas deliciosas vibraciones.
También hay juguetes vaginales, como la Bala de Tsunami Power para las que prefieren la intensidad y las bolas chinas vibradoras Marble para las que prefieren empezar con algo más sutil: “Son muy blanditas, no pesan y prometen una estimulación suave”, apunta la experta.
Tanto en pareja como para jugar solo, hay estimuladores anales que amenizan cualquier cuarentena, como Idylic o Crotate que “pueden estimular a la vez que ayudan a la dilatación”. Para quienes quieran centrar su atención en la próstata, la experta recomienda Falcon o Puma.