Una encuesta del Foro Económico Mundial recoge las ideas y percepciones de los jóvenes a nivel global
Desconexión de los dirigentes con los jóvenes: un 72% quiere acoger refugiados
La UE decidió en julio de 2015 reubicar a más de 90.000 personas refugiadas desde Grecia e Italia, pero el plazo expira en septiembre y solo han llegado alrededor de 20.000. En esta cuestión, como en muchas otras, los dirigentes de todo el mundo están profundamente desconectados de las demandas y puntos de vista de los jóvenes: un 72,6% de las personas entre 18 y 35 años se muestra a favor de recibir a los refugiados en su país, mientras que más de un tercio de ellas (un 27,3%) incluso los acogería en su propio hogar. Son los datos de una encuesta publicada por el Foro Económico Mundial (FEM), que recoge las percepciones e ideas sobre el futuro de jóvenes de 186 países en 14 idiomas diferentes.
“El 50% de la población mundial tiene menos de 30 años. Aunque alzan fuerte la voz, no son escuchados por quienes toman las decisiones”, se explica en la Encuesta Anual de la Comunidad de Impulsores Mundiales (Global Shapers). El dato que llama poderosamente la atención es que una amplia mayoría de los 31.495 consultados para la encuesta acogería a los refugiados. De todos ellos, un 51,3 los recibiría en su país, un 49,6% en su vecindario y un 27,3% incluso los admitiría en su casa. Únicamente un 7,4% se muestra en contra de que lleguen a su país.
Además, ante la pregunta “¿cómo deben responder los Gobiernos a la crisis de refugiados?”, más de la mitad de los jóvenes (un 55,4%) creen que deberían incluirse en la población activa porque reportarían beneficio a los países de acogida. El estudio considera que los jóvenes tienen “una actitud muy positiva de aceptación de los refugiados que se expresa en la mayoría de las regiones”, lo que demuestra “una actitud empática con los demás”.
Un dato a destacar es el de EEUU, donde el 80% de los jóvenes “se sentirían cómodos con los refugiados viviendo en sus propios vecindarios”. Esta imagen contrasta frontalmente con el discurso y las políticas de su presidente, Donald Trump, quien ha llegado a vetar la entrada de refugiados de varios países y se ha propuesto reducir la inmigración ilegal a la mitad, con un aumento drástico de las detenciones.
Amnistía Internacional publicó el año pasado una encuesta que revelaba que cuatro de cinco personas recibiría a los refugiados en su país. Los resultados de FEM corroboran el sentir de la mayoría de la población mundial. “Las personas que huyen de la violencia y la persecución han visto reiteradamente cómo los gobiernos ricos les daban con la puerta en las narices arguyendo su imposibilidad para ayudarlas. La investigación del FEM muestra que la gente joven no se cree este discurso y está consternada por las actitudes desalmadas de sus líderes”, ha señalado el secretario general de AI, Salil Shetty. Dos años después de la trágica foto de Alan Kurdi conmocionase al mundo, “muchos gobiernos aún continúan sin cumplir incluso los exiguos compromisos de reasentamiento, y todo apunta a que 2017 será el año más mortífero para las personas migrantes y refugiadas que cruzan el Mediterráneo”, ha criticado.
Gobiernos y jóvenes: mentes en direcciones opuestas
Por el tercer año consecutivo, “el cambio climático y la destrucción de la naturaleza” es la principal preocupación global de los jóvenes, según un 48% de los encuestados. Los conflictos y las guerras son el segundo problema más importante según un 38,9%, mientras que la desigualdad económica y la discriminación son consideradas la tercera cuestión a solucionar a nivel mundial para el 30,8%. Más del 90% de los encuestados están de acuerdo o muy de acuerdo con la siguiente frase: “La ciencia ha probado que los humanos son responsables del cambio climático”. De hecho, un 78,1% se muestra dispuesto a cambiar su modo de vida para proteger el medioambiente, mientras que un 20,1% opta por un “podría ser” y solo un 1,8% se niega rotundamente a ello.
De nuevo, los Gobiernos se encuentran a años luz de los jóvenes respecto al cambio climático. Las emisiones de CO2 a la atmósfera no han dejado de aumentar desde la Revolución Industrial y, aunque el año pasado 195 países firmaron el Acuerdo de París para reducir las emisiones de Gases Efecto Invernadero (GEI), en junio de este año Trump anunció la retirada del país del acuerdo, siendo uno de los países más contaminantes y que más podría contribuir con aportación tecnológica y financiación económica para que se cumpliesen los objetivos marcados.
Otra preocupación de los jóvenes que poco parece importar a los gobiernos es la corrupción. Para la mayoría, además de ser uno de los grandes problemas a combatir, también es la causa principal que contribuye a la desigualdad en los países. Un 48,6% señaló que la corrupción era la primera culpable de la desigualdad, un 43,2% indicó echó la culpa a los ingresos, un 38,8% optó por el acceso a una buena educación y un 35,5% se decantó por la discriminación de todo tipo (de raza, de género, religiosa...), mientras que un 27,1% lo achaca a los impuestos y las políticas de sus Gobiernos. No obstante, en Europa y en Norteamérica los jóvenes no ven en la corrupción la causa principal de las injusticias: optan por los ingresos, en primer lugar, y por la discriminación, en segundo lugar.
Los jóvenes, más influyentes en el voto de lo que los Gobiernos creen
Un total del 55,9% de los jóvenes están en desacuerdo o en profundo desacuerdo con esta cuestión: “En mi país, las opiniones de los jóvenes son consideradas antes de tomar grandes decisiones”. Esta tendencia, según señala el estudio, se repitió en todos los géneros, las edades y los países de todo el mundo. Los latinoamericanos y caribeños fueron los que se mostraron más en desacuerdo con este planteamiento, con un porcentaje que rozaba el 70%.
Los llamados millenials –la generación que ha alcanzado la mayoría de edad con el nuevo milenio-- aparecen en el libro 'Millenials Rising': the next generation”, de los sociólogos Neil Howe y William Strauss, como aquellos jóvenes muy vinculados a las nuevas tecnologías de la información, muy predispuestas al cambio y más favorable al movimiento y a la protesta que a la participación tradicional en elecciones, partidos políticos o sindicatos. Las nuevas generaciones siguen siendo un segmento de población a conquistar por los partidos políticos.
En España, la irrupción de Podemos en la escena política fue significativa. En las últimas elecciones se llevó un gran pellizco del voto joven, alrededor de un 40% aseguró haberlos votado, según Metroscopia. El PSOE supo leer los datos y, con Pedro Sánchez de nuevo al frente, se prepara para intentar conquistar a los jóvenes que simpatizaron con la formación morada. Entre sus primeras estrategias para seducirlos destacan dos: la “resituación” del partido en la izquierda y el plan de rescate a la juventud.
les acojemos y nos matan
¿ No será que los dirigentes se pasan por el arco del triunfo a los jovenes ?. Hay partidos floreros, pijos; de un capitalismo feroz, y destructivo… Sí, aqui mismo nos gobiernan el trio calavera; no hace falta irse a EEUU, Rajoy, no es Trump, pero se hace lo que manda el Yankee. ¡ Que alegria, cuando cayó el muro de Berlin !… ¡ Cuantos se han construido, o se piensan levantar !.¡ El capitalismo salvaje, en manos de ineptos en sobre simulado… O en diferido !. Los jovenes, parados, pensionistas, obreros en precario… Deben de dar el salto, mojandose en las cosas que nos afectan a la mayoria; asi, el cambio llegará antes, y podrás ver la luz del tunel que nos han metido esta panda para delinquir.