PANDEMIA COVID-19
Reducir la brecha digital de personas vulnerables en tiempos de pandemia
- El proyecto Reutiliza-K trabaja en Madrid para proporcionar ordenadores a entidades que no tengan y reparar antiguos
- La brecha digital no se cierra sólo con tener internet con un móvil y conexión, recuerdan desde esta asociación
Teletrabajo ha sido una de las palabras más repetidas en los últimos días. Cuando comenzaron a tomarse medidas para contener la pandemia de coronavirus, las recomendaciones incluían teletrabajar. Pero claro, a quien le fuera posible. Una cajera de un supermercado, un barrendero, un conductor de autobús…Muchos son los que por su profesión no pueden hacerlo. Pero otras muchas personas, menos recordadas, tampoco pueden hacerlo por falta de recursos. Es decir, la llamada “brecha digital”. Muchas familias, aunque dispongan de teléfono móvil, no tienen un ordenador portátil en condiciones.
Reutiliza K es un proyecto de economía social de la Asociación La Kalle de Madrid. El objetivo es la inclusión sociolaboral de jóvenes en situación de vulnerabilidad y promover la reutilización de dispositivos electrónicos, reduciendo la brecha digital y contribuyendo con la sostenibilidad ambiental. “Chicos y chicas se forman con nosotros y la idea es que luego puedan trabajar en este proyecto”, afirma a cuartopoder Juan Flores, coordinador de Reutiliza-K.
Explica Flores que un aspecto fundamental es “la reutilización informática”. “Intentamos que las empresas nos donen los parkings informáticos y ponerlos en marcha para que las personas sin acceso a ellas puedan tenerlo”, comenta. Los aparatos se ceden entonces a entidades sociales y ongs con un coste muy por debajo del mercado de segunda mano. “No es una venta, es una cesión con una garantía de funcionamiento”, señala el coordinador del proyecto.
Recuerdan desde Reutiliza-K que la brecha digital no se cierra sólo con tener internet con un móvil y conexión. “Supone que las personas puedan buscar trabajo en condiciones con un ordenador o que los niños y niñas puedan hacer deberes. Ahora todo el mundo dice que tenemos que ser hipertecnológicos pero hay familias que no tienen formación ni recursos”, destaca. “Si no eres tecnológico no puedes desenvolverte”, añade.
Las claves del proyecto son la reutilización, la sensibilización y la formación para que se aprenda a arreglar ordenadores. Esto es importante ya que familias con pocos recursos no pueden acudir, por cuestiones económicas, a un técnico que le arregle sus aparatos estropeados. Desde Reutilliza-K se imparten habitualmente talleres para que tengan autonomía y puedan arreglarlos.
Todo este trabajo que viene realizando Reutiliza-K cobra más sentido en estos tiempos de pandemia y confinamiento. “Estamos preparando un párking informático de medio centenar de portátiles, los estamos poniendo a disposición de entidades sociales que tienen teletrabajo. Tú me puedes llevar a teletrabajar, pero si no tengo ordenador no puedo, o si es muy antiguo, o si solo hay uno para 5 personas de la familia, etc”, explica Flores.
Además, en algunas plataformas online se está ofreciendo servicio técnico para motivar a familias que pongan en funcionamiento estos ordenadores en desuso. Unos ordenadores que pueden servir para otras personas que lo necesiten.
Según los últimos informes publicados en nuestro país, la brecha digital sigue siendo relevante. Por ejemplo, según una encuesta del Instituto Nacional de Estadística (INE) publicada el pasado año, hay un millón y medio de viviendas que no disponen ni siquiera de conexión a Internet. Esto supone un 8% de la población. En cuanto a las habilidades, la encuesta del INE destacaba que 700.000 españoles no poseen ninguna habilidad digital y que otros 11 millones solo acredita habilidades digitales bajas. A esto se le suma que otro 21% (7,6 millones de personas) solo acredita habilidades digitales básicas.
Por otra parte, el sindicato UGT publicó también en 2019 unos datos significativos. Un 40% de españoles no saben lo que es un procesador de texto o un 37% no usa nunca correo electrónico. “Se trata de personas que no planifican sus vacaciones por Internet, ni usan la banca electrónica, ni pagan sus impuestos de forma telemática”, destacaba el sindicato.
Según los datos de UGT, la brecha digital se ceba especialmente en el colectivo de las mujeres (más del 60% de los desconectados son mujeres), en los mayores (existe una diferencia de 50 puntos porcentuales entre el uso de Internet entre nuestros adolescentes y los mayores de 65 años), en las personas con menores estudios (la educación superior duplica en uso de Internet a la educación primaria), en las familias con menor renta disponible (uno de cada cuatro personas que cobra el SMI es un excluido digital), en los que residen en zonas rurales (aún hay millones de conciudadanos que no pueden acceder a las nuevas tecnologías como consecuencia de la falta de infraestructuras de telecomunicaciones adecuadas) y en los desempleados (los parados usan mucho menos Internet que los trabajadores ocupados, hasta 12,4 puntos porcentuales menos).