Telegram, una alternativa seria a WhatsApp

En sólo una semana se ha convertido en la aplicación móvil de moda y no se habla de otra cosa. Telegram está llamado a ser el nuevo sistema de mensajería instantánea que todo el mundo quiera usar en su teléfono móvil, pero... ¿conseguirá realmente hacerle sombra a WhatsApp?

En los últimos meses, parece que al sistema de mensajería más popular no hacen más que salirle competidores. Durante un tiempo nos fijamos en Line, que gracias a los stickers y a un ecosistema de aplicaciones propio, consiguió eclipsar, aunque sólo durante un momento, a WhatsApp.

Sin embargo, el todopoderoso WhatsApp ha continuado aglutinando seguidores y esa es su principal baza para dejar atrás a cualquier posible rival. Tiene más de 430 millones de usuarios en todo el mundo y la cifra sigue subiendo a pesar de que ahora hay que pagar por utilizar la aplicación, aunque menos de un euro al año.

Aún así, parece que estamos todos esperando a que surja una alternativa para, por lo menos, correr a probarla. Esto explica el éxito que sólo unos días después de su lanzamiento ha cosechado Telegram, el último boom 2.0.

Durante la última semana, una media de 150.000 usuarios se han descargado la aplicación sólo en España. ¿Es justificado este éxito?

Ciertamente, Telegram ofrece una serie de funcionalidades extra que no proporciona WhatsApp. En ellas se basa la aplicación para plantarle cara y, de momento, parece que está convenciendo a cientos de miles de usuarios para que, al menos, la prueben.

Telegram es básicamente un sistema de mensajería instantánea común, pero aporta valor añadido. Una de esas diferencias está en el sistema de seguridad de la aplicación, cuyo lema es toda una declaración de intenciones: "recuperando nuestro derecho a la privacidad".

Telegram utiliza un sistema de cifrado de los mensajes que permite el intercambio de ficheros de manera más segura. Sus servidores están descentralizados y el usuario se conecta para enviar sus mensajes, fotografías y todo tipo de archivos al más cercano según su ubicación. Esto lo hace menos accesible a las garras de hackers y ciberdelincuentes que pudieran querer hacerse con información personal.

Telegram, como Snapchat, además permite enviar mensajes que se autodestruyen en un cierto tiempo que el usuario se encarga de fijar. Podemos seleccionar que los mensajes se eliminen en el teléfono del destinatario en sólo dos segundos, o elegir que permanezcan en el dispositivo más tiempo, desde un minuto a un mes.

Para enviar este tipo de mensajes tan sólo hay que acceder a la función "New secret chat". Los mensajes se envían encriptados y prácticamente indescifrables para cualquier sistema espía.

Otra ventaja con respecto a WhatsApp es que Telegram permite realizar conversaciones en grupo entre más de 200 usuarios, mientras que WhatsApp tiene un límite de 50 participantes.

Telegram incorpora otras funciones que recuerdan a esta aplicación. Por ejemplo, también utiliza el sistema de aspas para indicar que un mensaje ha sido enviado (con una) o que ha sido recibido en el dispositivo del destinatario (dos aspas). Eso sí, hay que tener en cuenta que en este sistema la doble aspa tampoco significa que el receptor haya leído el mensaje, únicamente que lo ha recibido en su teléfono.

Al igual que WhatsApp, Telegram también utiliza el número de teléfono para identificar al usuario, que además puede usarla en varios dispositivos a la vez. Además, algo muy atractivo es que está desarrollada con software libre, lo que permitirá que desarrolladores de todo el mundo puedan modificar el código de la aplicación, mejorarla e incluso incorporar más funcionalidades.