No a la reconciliación
En las pasadas elecciones gallegas el PSOE perdió alrededor de 200.000 votos, y obtuvo siete diputados menos que en las anteriores. En las de Euskadi perdió más de 100.000 votos y nueve diputados. En las generales de 2011 el partido de Rubalcaba perdió seis millones de votos, y pasó de 169 escaños a 110 diputados, 59 diputados menos, la peor marca registrada de escaños durante la presente democracia (desde 1978). El hundimiento.
Analistas y tertulianos se frotan las manos: esta crisis de dimensiones insondables es una mina para aquellos que viven, que vivimos, del comentario. Nada es blanco o negro, todo está plagado de suculentos grises. Queda abierto un espacio inagotable para el rumor, la hipótesis, la suposición, la sugerencia, la apreciación, el chisme, la murmuración, la conjetura, el runrún e incluso el chascarrillo.
"Es el PSOE quien primero ha abandonado a su electorado, no al revés", escribe Arsenio Escolar en su blog. “Gracias a la crisis del PSOE vivimos en una democracia unipartidista”, dicen en RNE. “La izquierda, el PSOE, necesita reinventarse”, aseguran en la cadena SER. Javier Gallego hace en El Diario una crítica dura, pero razonada y muy interesante, al líder socialista: “Váyase, señor Rubalcaba”. En el mismo medio Odón Elorza sugiere que “El PSOE sigue arrastrando las consecuencias de los errores del Gobierno de Zapatero”. A Inmaculada Rodríguez Piñero, miembro de la Ejecutiva Federal del PSOE e invitada a “Los desayunos” de TVE, un tertuliano le dice que es difícil entender cómo alguien puede seguir confiando en Rubalcaba. La respuesta de Rodríguez Piñero es una explicación de la crisis socialista: “Hay que corregir, lo importante es que recuperemos la confianza, y que lo hagamos juntos, y que lo hagamos en la dirección que reclaman los ciudadanos”. Mediocridad.
Desaparecido durante días como el mejor Rajoy, Rubalcaba por fin dio ayer la cara: “no pienso dimitir; cumpliré mi tarea hasta 2016… el PSOE me eligió para recuperar la confianza y voy a cumplir”. ¿Se aferra Rubalcaba a la nada? Quizá tenga en la cabeza que Rajoy se convirtió en presidente tras dos derrotas que parecían incapacitarle para siempre.
“Trabajamos para reconciliarnos con la España progresista”, ha sentenciado Elena Valenciano, secretaria general del PSOE. Quizá todo sea más sencillo, y la España progresista no quiera ninguna reconciliación con el PSOE. Porque la España progresista ha comenzado a mirar más allá del bipartidismo, y sueña con una izquierda de verdad, con una alternativa al Partido Popular realmente renovadora y reformista. Una España progresista que no puede perdonarles que sean unos socialistas de pega. De esos que indultan banqueros, temen el poder de la iglesia, mantienen las cunetas llenas de cadáveres y evitan las reformas fiscales.
¿Reconciliación? De ninguna manera. Necesitamos una izquierda completa, total y absolutamente nueva. Ese partido tan radical y antisistema como para no admitir jamás en sus filas a alguien como José Bono.
Me quito el sombrero, Javier. Chapó.
Dice Ruby ue si alguien le pide que se marche, se irá. Que se lo pida alguien, poldiosbendito….
Esto va a ser como cuando González se fue. 8 años tardó el PSOE en encontrar un sustituto que convenciera. Luego salió rana, pero eso es otra historia.
No aprendemos del pasado y el PSOE corre el riesgo de tirarse otro porrón de años en paro, solo ue la situación es ahora mucho peor para ellos.
Como IU y UPyD sepan comerles el terreno y mantenerlo (esto último ya no lo veo nada claro, por ninguna parte) se pueden ver en serios problemas. Y los españoles más, ahogado en mierda de gaviota ley D´hont mediante…
El PSOE necesita una refundación, una reconstrucción desde los cimientos. Nueva ejecutiva, nuevas caras, nuevas propuestas y, si me apuras, nuevos estatutos que barran los políticos profesionales que están instalados en sus alturas, anquilosando su funcionamiento.
Este partido ha perdido totalmente su credibilidad y su imagen de partido de izquierdas, aunque sea moderado. Ha cavado su propia tumba tratando de colocarse en una equidistancia política que se ha demostrado que no le corresponde.
Mientras no entiendan esto, y por muy mal que lo haga el PP (que ya lo está haciendo), los votos que éste pierde no redundarán en una mejora para el PSOE.
Si algo describe al PP es que es reconocible, quizá por eso su suelo de voto fiel es tan estable. Es lo que ha perdido el PSOE: ya no lo reconoce ni la madre que lo parió, como diría Guerra.
…socialistas de pega. De esos que indultan banqueros, temen el poder de la iglesia, mantienen las cunetas llenas de cadáveres y evitan las reformas fiscales: no se puede decir mejor.
¿Dónde están todos los palmeros de Zapatero y sus encuentros planetarios en las nubes?
Ya no hay ningún seguidor del iluminado que iba a transformar el mundo.
Me recuerda a los seguidores de Franco. Una vez muerto ya no quedaba ni uno de los que llenaban prensa, radio, televisión y plaza de Oriente. ¡Qué curioso que nadie de los que ayudaban y se dejaban comprar, haya tenido ninguna culpa en lo que le ocurre al PSOE!
¿Dónde están los del cinturón sanitario, la zeja y demás subvencionados?
¿Dónde están los que se reían del «España se rompe»? ¿Estarán haciendo cábalas con el Molt Honorable para ver cuánto les toca en el reparto?
Todavía quedan socialistas no manchados con el estigma zapateril y nacionalista, que podrían intentar recuperar algo de lo que hubo. Hoy el PSOE sólo está a ver lo que les queda del naufragio para salvar cada uno su culo (con perdón).
Sr. Pérez de Albéniz, no he leído nada suyo en el mismo sentido que el artículo de hoy, durante el tiempo del infausto Zapatero. ¿Ya no tiene miedo a que le estigmaticen porque ya no mandan?
Parafraseando al Sr. Leguina, «hay mucho anti-zapaterista sobrevenido».
Yo me voy a Francia,ya lo estuve con el General.
Curioso, la republica no servia y claro 4o años de dictadura… al paso que van ustedes seguro que tenemos neodictadura para varias decadas.Insisto,decidido yo me voy a Francia , pues con politologos periodistas etc, como usted Sr.Perez de Albeniz lo tenemos claro (a me olvidaba) para ser moderno…que malos que malisimos son los socialistas ¡váyase¡ Sr.RUBALCABA ¿ESTÁ BIEN ASÍ?…La Caverna y Genova frotandose las manos…perdon os dejo pues tengo hora en la pelu para hacerme los rastas
¿Sabian los nuevos «progresistas»‘ de la estrategia MARTINES ANIDO?… por citar solo un ejemplo de conciencia historica…Haro Teglen escribio…»la historia no se repite pero se parece»
Plas plas plas genial Boss, de lo mejorcito que te he leido, enhorabuena
Qué buen post, tan sencillo y tan cierto. La izquierda es otra cosa señores del PSOE, algo a lo que no debisteis renunciar en mayo de 2010, a pesar de lo que dijera Europa, ni tampoco cuando reformasteis la C.E. dejándole las manos libres a Rajoy…. y la justificación
Hace ocho años, el PSOE ya andaba desesperadamente necesitado de revisión, discusión y catarsis que no hicieron porque se les apareció un zapatero prodigioso. Y así nos va a todos.
Pero, ¿a qué viene tanta rasgadura de vestimenta? ¿Es que no han leído a Tony Judt? No es cosa del PSOE es cosa de la socialdemocracia que se pringó con el poder verdadero -el de «todo por la pasta»- desde el principio de los años 80. De nada sirve poner pomada donde lo que hay es una metástasis del copón bendito.
¿Y cual va a ser esa alternativa de izquierdas?¿De dónde va a salir?. Siento decirlo pero a día de hoy en España no hay ningún partido de izquierdas, ni movimiento social, capaz de hacerse cargo de una renovación del sistema.
Pensar que podemos prescindir enteramente del PSOE es de tontos. Mal que nos pese, a corto plazo la única forma que tenemos de llevar a la realidad algunas reivindicaciones de la izquierda pasa a través de este partido.
Sinceramente,Jorge gracias por su reflexión,su comentario…¿para cuando un foro de pensamiento? sin los profesionales-GARBANCEROS QUE NO DAN UNA OPINIÓN SIN UN EURO…SI SOY UN BUFÓN,pero excepto los profesionales de la cultura el 90 por ciento de la prensa trabaja para la caverna y para Génova y si no es así, por lo menos lo parece…Jorge si me pide mi correo se lo lo escribo con gusto.