El rey Juan Carlos ha felicitado a Rajoy, presidente de un Gobierno rescatado. “¡Enhorabuena!”, dijo el monarca a Mariano sin ningún tipo de ironía. Lamentablemente, el cazador de elefantes no aclaró el motivo de tan entusiasta parabién en tan penosas circunstancias. ¿Enhorabuena? ¿Por qué motivo? Rescatados, con la prima de riesgo disparada y la bolsa bajando, con más de cinco millones de parados, con recortes brutales en sanidad y educación, con un millón de titulados universitarios en paro, con indemnizaciones millonarias para los gestores de las cajas de ahorros en quiebra, con el 23,1% de los españoles de 18 a 24 años sin estudiar ni trabajar, con todos los miembros de la Gürtel en la calle, con el presidente del Supremo enrocado en sus propias mentiras y aportando datos falsos, con la pobreza infantil creciendo un 10% en España durante los dos últimos años, con Moody´s dejando la solvencia de la deuda española al borde del bono basura, con... ¿Enhorabuena? “Ganó Nadal, tenemos el séptimo Roland Garros… y la economía va a ir a mejor”, asegura el bueno de Martínez-Pujalte, portavoz de economía del PP en el Congreso, en “Los desayunos TVE”.
Juan Carlos y Rajoy son dos supervivientes que, aferrados a los restos de sus respectivos naufragios y acunados por las mismas olas, se jalean mutuamente. “¡Enhorabuena Mariano! Has puesto a esos alemanes en su sitio y les has sacado las perras, con dos cojones”, dice uno agarrándose con los dientes al flotador. “Hablando de alemanes… ¡qué maciza está la Corinna! ¡Enhorabuena amigo!”, responde el otro, sujetándose con las uñas a los restos de un bote. La prensa, siempre crítica con el poder, se hace eco de la pantomima y les dedica una portada...
Es difícil estar de enhorabuena cuando no tienes motivos. Y eso que intentan que todo sea lo más opaco posible, que no tengamos información de calidad, que nos conformemos con una victoria a raquetazos conseguida en París. O con la inminente visita de un rey, últimamente hiperactivo, a una roca perdida y olvidada. Cuando no tenemos nada, siempre nos queda… ¡España!
Pero seamos realistas: si a usted le concedieran un préstamo ¿se alegraría antes de conocer los detalles del mismo, la letra pequeña, las condiciones, los plazos? Vamos a dejar las nuevas gallinas, esas que compraremos con el dinero que nos presta Europa, en manos de las mismas zorras que se comieron a las anteriores. Somos gilipollas, pero no tanto como para estar de enhorabuena.
Es posible que la frase fuera algo como: «Enhorabuena, has logrado meter la pata mas que yo».
Albéniz, no puedo por menos que darte todo mi apoyo ante la carta llena de soberbia que te escribe Montserrat Dominguez. La soberbia, ese virus tan extendido en Prisa, que impide entender otras opiniones…
Gracias Monica!!!!
La única manera de reactivar la economía de este país es arrojando los cien mil millones desde helicópteros.
El monarca se vuelve a retratar. Desde luego, está con el don de la oportunidad subido.
Si quieren saber lo que significa ser un patriota, que se remitan a las palabras de un tal Federico García Lorca: «Yo soy español integral y me sería imposible vivir fuera de mis límites geográficos; pero odio al que es español por ser español nada más, yo soy hermano de todos y execro al hombre que se sacrifica por una idea nacionalista, abstracta, por el sólo hecho de que ama a su patria con una venda en los ojos. El chino bueno está más cerca de mí que el español malo. Canto a España y la siento hasta la médula, pero antes que esto soy hombre del mundo y hermano de todos. Desde luego no creo en la frontera política.»
Desgraciadamente, ya sabemos lo que le pasó a García Lorca, y quién se lo hizo.
Viva la República. Saludos.
Una desvergüenza de la clase política en donde nada importa, nadie contesta por sus acciones o responsabilidades. Con que gane la selección (de fumbol valga la archi-redundacia) o algún figura de relumbrón… pues eso… no pasa nada. Todo estupendo. Hemos desviado otra vez la atención del populacho. Enhorabuena.
Joer, Albeniz, cómo te pone la prisa Dominguez por defender el pago del trabajo frente a las novedosas técnicas de acumulación del capital.
Se me olvidó: Magnífico artículo, Albeniz. Dicen que después el Rey le dijo al gobernardor Linde: ¡Vaya momento!
La pena es no haber aprovechado la foto, que estaban juntos los 3 pajarracos, para haberlos detenidos a todos juntos. Como mínimo, pa un asilo están 😉
Enhorabuena de que. Esta gente de verdad se cree estas cosas. Yo pienso que no les importa nada lo que pueda pasar mientras uno tenga sus cacerias y el otro tenga a todos sus amigos corruptos bien colocados y llevandoselo muerto, que sinverguenzas. Solo hay dos clases de politic@s, los corruptos y los ineptos.