LAS IZQUIERDAS
El PCE apuesta por afianzar Unidas Podemos de cara a un periodo de “guerra de posiciones”
- Los documentos de los comunistas descartan una unión orgánica con Podemos, su proyecto es IU
- Buscarán alianzas con independentistas y nacionalistas periféricos en favor de un "frente democrático" contra la ultraderecha
Se cierra un ciclo político. La llamada "crisis de régimen" puesta de manifiesto con la crisis económica global del 2008 abrió en canal los consensos del 78 en el Estado español. Primero, fueron las movilizaciones sociales, con especial relevancia del 15M, las que reflejaron el descontento social. Después, el conflicto en Catalunya, con su culmen del 1-O del 2017, resquebrajó los acuerdos territoriales. La corrupción, con un primer plano sobre la monarquía y la abdicación de Juan Carlos I, demostraba que la institucionalidad vigente entraba en fase de desfase. Las nuevas izquierdas, al calor del surgimiento de Podemos y otras fórmulas, abrían una nueva etapa que se atrevía a programar un jaque al sistema: una ruptura democrática.
Se acaba un ciclo. Ni ruptura democrática, ni proceso constituyente, ni nada que se le parezca. Pero se abre un nuevo periodo en el que las derechas se han radicalizado bailando a gusto sobre la melodía del conflicto nacional, la ultraderecha cada vez consigue más protagonismo empujada por un contexto favorable internacional y las izquierdas situadas más hacia la zurda del PSOE han entrado por primera vez en el Gobierno de España. Nuevos retos, nuevos horizontes. Y los distintos partidos de izquierdas, sumadas todas aquellas formaciones surgidas como consecuencia de las peleas y rupturas internas, se reorganizan. En los próximo meses, un reguero de cónclaves y congresos, tal y como contó cuartopoder. Se acaba un ciclo político y comienza uno nuevo. La reestructuración de la izquierda está en marcha.
Y así, el PCE celebra una Conferencia Política el próximo 4 de abril en la que culminará un debate sobre cómo reorganizarse para la etapa que viene. Según sus documentos, una etapa caracterizada estratégicamente por ser una "guerra de posiciones" en la que sin renunciar al horizonte de la ruptura democrática, lo revolucionario, hacen falta acuerdos tácticos con otras fuerzas democráticas, lo reformista, para hacer frente a la oleada reaccionaria. "El PCE reafirma la estrategia de ruptura democrática y la necesidad de abrir un proceso constituyente para institucionalizar derechos sociales, laborales y profundizar en la democratización de todos los niveles y poderes del Estado. Al mismo tiempo el PCE, en su mejor tradición histórica, plantea la necesidad de alcanzar acuerdos tácticos", reza el texto elaborado por el secretario general Enrique Santiago.
Acuerdos tácticos, o consolidar un "bloque democrático", el cual parlamentariamente ha dado sustento a la formación del Gobierno de Pedro Sánchez y Pablo Iglesias, frente al "reaccionario". Y, para ello, caben los acuerdos con nacionalismos periféricos e independentistas de izquierdas que confronten contra las derechas y ultraderechas cada vez más echadas al monte.
Una figura clave. Para el PCE, Unidas Podemos es el sujeto político en el cual basar la creación de una "unidad popular" que ha de ser ampliada más allá de lo electoral y de lo institucional. Un punto de partida sobre lo construido estos años, porque, frente a la dicotomía movimientos-instituciones, entre vivir en el Palacio o en la Plaza que decía Pier Paolo Passolini, ahora el PCE vuelve a reivindicar "que la política en las instituciones es Política con mayúsculas". No es secundaria, no es una “derivada” de la calle". Pues ya no están las calles llenas de marchas y mareas, ya no están las plazas ocupadas por acampadas... Ahora las movilizaciones sociales, de hecho, se centran en lo sectorial (conflictos laborales, luchas temáticas...), por lo que la organización política ha de priorizar lo sectorial frente a lo territorial.
Así, Unidas Podemos es el sujeto sobre el cual el PCE consolidará su acción política, animando a ampliar la "unidad popular en un proceso que vaya más allá del simple acuerdo con Podemos, más allá de una coalición de partidos". "Defendemos la construcción de un espacio unitario en el que puedan convivir partidos, colectivos sociales y personas a título individual que se unen en torno a un programa", ansían los comunistas, tal y como vienen reflejando en distintos congresos y documentos.
Y esa construcción de un sujeto político no implica, en absoluto, una asimilación orgánica con Podemos, ni la disolución de IU como ha publicado algún medio. Primero, porque Podemos no está por la labor de ello. Segundo, porque la apuesta del PCE es fortalecer IU, la cual, para los comunistas "sigue siendo un instrumento político esencial a través del cual el PCE plasma y realiza su política de convergencia". Es más, consideran que "solo desde la amplia participación de los comunistas se podrán sintetizar de manera dialéctica nuestras propuestas con las del resto de integrantes de IU, así como dirigir y hegemonizar el proceso de superación de la actual IU". La superación de IU, que no cunda el pánico, "no pasa por disolverla, sino por tratar de superar su modo actual de funcionamiento de manera que las condiciones de esa superación sean también las de la posibilidad de una convergencia más amplia".
Si la apuesta de Podemos, de IU y del PCE no es una fusión orgánica, como en momentos anteriores se ha llegado a plantear, ¿cuál es? Pues una "propuesta de vertebración del espacio unitario que sirva de mecanismo de coordinación de las organizaciones". Esto ya se hace, en la Mesa Confederal del Congreso, donde participan las distintas organizaciones que conforman Unidas Podemos-En Comú Podem-Galicia En Común.
Sin embargo, ahora quieren que esa coordinación traspase la institución y baje a los distintos territorios. "La generación de unas mínimas estructuras de coordinación territorial", dicen, para "que desarrolle democraticamente Unidas Podemos". Redes que acojan a "una base amplia, un funcionamiento horizontal, flexible" y que "permita el trabajo diario y codo con codo con colectivos, intelectuales, sindicalistas y activistas sociales que no se vincularían a un proyecto con vocación electoral".
Ese trabajo conjunto ya está teniendo lugar en las distintas asambleas de Unidas Podemos por los territorios para explicar el acuerdo de gobierno, tal y como contó este periódico. Unas asambleas que tendrán como acto central el de este sábado por la mañana, tal y como relató Público, en la Fundación Diario Madrid con la participación de Pablo Iglesias, Alberto Garzón y Ada Colau.
¡Ojo, con estos! Que viendo el cristo que armó el otro día en el Congreso de Diputados el Gran Macho para desviar la atención del caso de la prostitución de Mallorca. Todo un ejemplo de fascismo de lo más manifiesto y canalla. Ni el gran jefe nazi, Goebbels lo hubiera hecho mejor
Y ojo también con los meteoritos….