ENTREVISTA
Isa Serra: “Díaz Ayuso está más preocupada por abrir bares que por abrir centros de salud”
- La diputada y portavoz de Unidas Podemos en la Asamblea de Madrid regresa a su actividad política tras su permiso de maternidad
Isa Serra (Madrid, 1989), diputada y portavoz de Unidas Podemos-IU-Madrid en Pie en la Asamblea de Madrid, regresará de su permiso de maternidad en los próximos días. Desde que se apartó de la primera línea política en el mes de febrero, ha ocurrido de todo. La pandemia se ha cebado con especial fuerza en Madrid y, en concreto, con sus residencias de personas mayores. La política ha subido el nivel de la bronca y las derechas aprovechan la coyuntura para intentar desestabilizar el Gobierno de coalición del Estado y, en esto, el papel de la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, es protagonista. Además, en el aspecto personal, el pasado 23 de abril, Serra era condenada a 19 meses de cárcel por los delitos de atentado a la autoridad, lesiones leves y daños por su participación en la protesta contra un desahucio en 2014.
- Durante esta pandemia, hemos aprendido cómo en un país como España, en Occidente, también somos vulnerables a tragedias del calibre de la generada por el coronavirus. ¿Qué lecciones hemos aprendido en estos meses para transmitírselas y enseñárselas a las generaciones que vienen, como el caso de su hijo?
- Esta crisis nos ha hecho más humildes a la sociedad en general y a quienes han mantenido responsabilidades públicas. Hemos pasado por algo terrible, sigue estando ahí y hay que seguir siendo prudentes, pero hemos dado una lección de responsabilidad y fuerza para poder, según parece y siendo prudentes, superar este virus. Más allá de todo lo negativo, del dolor causado en tantísimas personas por la pérdida de seres queridos, también hay lecciones que sacar.
En primer lugar, hemos podido percibir de una forma más evidente esa crisis de cuidados que estaba latente desde hace muchos años pero que en momentos de crisis emerge con más fuerza y repercute, sobre todo, a las mujeres. Cuando se ha parado todo, se ha visto cuáles son las actividades esenciales, hasta el punto que se ha debatido y se ha elaborado un decreto para especificar cuáles son estas actividades, y especialmente han sido personas precarias las que las llevan a cabo, principalmente las mujeres. Son las mujeres las que han estado mayoritariamente al frente de las actividades esenciales, de servicios públicos como la sanidad, de las farmacias abiertas, en la limpieza... Ha sido una crisis de cuidados que ha tenido muchas variables, como que el cierre de colegios ha llevado los cuidados a casa y se han hecho insostenibles con el teletrabajo. Esto tiene que conllevar que se hagan políticas públicas, que ya se ponen en marcha desde el Gobierno central, para hacer frente a los cuidados de una manera urgente.
"La pandemia nos ha permitido también ser conscientes de esa necesidad de cooperación internacional"
Otra lección es la importancia de lo público, los servicios públicos, y también de la cooperación internacional. He estado leyendo este confinamiento sobre cómo para combatir el cambio climático se requiere de la cooperación internacional y que cuando lleguen los efectos del cambio climático con más fuerza nos daríamos cuenta de ello. La pandemia nos ha permitido también ser conscientes de esa necesidad de cooperación internacional que se debe plasmar en una Unión Europea que sea diferente de la que conocimos tras la crisis del 2008 y las políticas de austeridad.
- Hablaba de la importancia de lo público. Esta semana, la presidenta Díaz Ayuso anunciaba la entrada de la colaboración público-privada en otro hospital, el Hospital Niño Jesús. Parece que este consenso por la Sanidad pública no es tal.
"La única salida que va a plantear el PP y la derecha es más especulación"
- Díaz Ayuso es incapaz de asumir las lecciones que hemos sacado de esta crisis. Toda la derecha en su conjunto. Cuando vemos una crispación tan grande por parte de la derecha, como cuando Cayetana Álvarez de Toledo llama terrorista al padre de Pablo Iglesias, muestran su incapacidad de entrar en el debate público de proyectos e ideas y plantear un modelo económico, social y político que nos permita enfrentar al virus, evitar que haya un rebrote, y también intentar dar soluciones a la crisis social y política. Siguen en su defensa de la privatización y degradación de los servicios públicos y eso es incompatible con defendernos del virus y de la crisis económica. Vemos cómo Díaz Ayuso está más preocupada por abrir bares que por abrir centros de salud.
Lo que hemos visto también es que Díaz Ayuso presentaba una serie de medidas muy leves para afrontar la crisis social derivada de la covid-19, pero qué casualidad que estaba allí su ley del suelo. En ese sentido, la única salida que va a plantear el PP y la derecha es más especulación, privatización, más beneficios para unos pocos. Esto no es compatible con los derechos humanos y sociales de la ciudadanía.
- ¿Qué opinión le merece el estilo de la presidenta? ¿Es el Gobierno autonómico punta de lanza contra el Gobierno de coalición del Estado?
"Díaz Ayuso ha utilizado esta crisis para abanderar esta guerra contra el Gobierno estatal"
- Díaz Ayuso ha sido una más del conjunto de la derecha que se ha dedicado a contaminar el debate público y a enfrentarnos y lo ha hecho con todo tipo de bulos y mentiras. No solo esos bulos se han emitido por parte de perfiles de extrema derecha, desde los propios gobiernos, como el de la Comunidad de Madrid, se han emitido bulos. Que Díaz Ayuso diga que los 70 centros de salud de atención primaria están cerrados porque los ha cerrado el Gobierno central cuando los ha cerrado el autonómico es algo muy grave. Que insista que las residencias son competencias de Pablo Iglesias cuando son competencias autonómicas... Son bulos, son mentiras que han generado una crispación mayor y han enturbiado todo.
Díaz Ayuso ha utilizado esta crisis para abanderar esta guerra contra el Gobierno estatal, para construirse un perfil estatal y liderar la oposición. Ha hecho este intento que convencerá a unos pocos y genera rechazo de muchos y no solo por su mala gestión. Creo que Díaz Ayuso ha hecho una mala gestión de la crisis, ha llenado Ifema de personas en un acto poniéndonos en riesgo a todos, ha dado una entrevista a El Mundo llena de falsedades y teatro con unas fotos que yo creo que es reírse de las víctimas... Pero hay un problema de fondo que va más allá de esta mala gestión: la voluntad de enturbiar el debate público y ese proyecto político que es antagónico a la solución frente al virus y la desigualdad.
- La mayor tragedia de esta pandemia ha sucedido en las residencias de ancianos, especialmente en las madrileñas. Podemos Comunidad de Madrid reclamó por la vía judicial su medicalización. Hemos conocido un informe por el cual se excluía a algunos enfermos en residencias al traslado a hospitales.
"Necesitamos un sistema de dependencia, no solo de residencias, cien por cien público"
- Lo que se ha demostrado con lo que hemos conocido sobre los criterios para derivar a personas mayores a las UCI es algo que prácticamente Ayuso había reconocido en aquella entrevista a El Mundo de las famosas fotos. Ella responde que si ha habido criterios técnicos según los cuales se ha decidido no derivar de forma urgente a personas mayores a los hospitales sino dejarlas en las residencias, no lo podía valorar a toro pasado. Esto me parece tremendamente terrible, en primer lugar, porque creo que está diciéndole a la ciudadanía que las personas mayores valen menos, que parece que es inevitable que se hayan muerto y, en segundo lugar, que parece que como presidenta de la Comunidad de Madrid no iba a hacer todo lo posible por salvar esas vidas.
Pero hay otra cuestión. Si ha habido alguien que por criterios técnicos ha considerado priorizar a otras personas que a las personas mayores, es por la falta de recursos que hay en el sistema público de salud y en las residencias. Antes de los criterios técnicos para decidir sobre unos recursos escasos, está la decisión previa política de reducir esos recursos. La responsabilidad es del PP, evidentemente.
Con respecto a las residencias, por desgracia por todo el dolor que ha generado en muchas personas, se han planteado muchas denuncias por parte de familiares y de la Marea de Residencias. Estamos con ellos. Se han planteado muchas denuncias sobre las irregularidades que se han cometido en las residencias. Más allá de la gestión propia del PP en esta crisis de negarse a medicalizar las residencias, algo a lo que se siguen negando a día de hoy y que su consejero de Políticas Sociales, Alberto Reyero, lo había pedido y le apartaron por esto, hay algo que se ha aclarado: el modelo de gestión privatizado es absolutamente incompatible con garantizar una buena atención a los mayores y sus derechos.
Este modelo es que grandes empresarios, con corruptos como Ulibarri, se han hecho con nuestros servicios públicos porque el PP se los ha regalado y esto ha generado que se priorice siempre el negocio de esas grandes empresas sobre la atención al conjunto de la ciudadanía. Creo que, como lección, debemos sacar que necesitamos un sistema de dependencia, no solo de residencias, cien por cien público, donde los cuidados a nuestros mayores sea el pilar pero donde también participen los familiares en las decisiones de esa gestión y los profesionales estén en unas condiciones no precarizadas, sino dignas.
- Durante estas semanas se ha criticado, desde algunos sectores de la izquierda, la oposición de Ángel Gabilondo por tenue. ¿Qué opinión le merece?
- Hay una parte de esa crítica que es justa y otra, injusta. Me parece injusta porque la Asamblea de Madrid tiene muy poca visibilidad, menos todavía si la Asamblea se cierra durante un mes y la invisibilidad sigue creciendo si la actividad que tenemos a día de hoy es solamente de control, no hay espacio para debatir iniciativas. En esto se ha escudado Díaz Ayuso para no tener que acordar nada con la oposición, no hacer ningún tipo de rendición de cuentas y parece que va a tratar de que el primer día que se inicien las sesiones se meta algo tan antisocial como la ley del suelo. Esto ha hecho también que se invisibilice la oposición a Díaz Ayuso en la Comunidad de Madrid.
Hay otro factor más, Díaz Ayuso se ha construido en esta crisis con un perfil estatal contra el Gobierno de Unidas Podemos y PSOE. Esto ha hecho que la disputa haya estado, en varias ocasiones, entre Díaz Ayuso y Sánchez e Iglesias. Por tanto, más invisibilidad para la oposición. Esto lo vivimos siempre quienes estamos en la Asamblea de Madrid, pero se ha profundizado en esta crisis. Se han hecho muchas cosas que no se han conocido y que no están saliendo en los medios de comunicación por parte de todos los grupos de la oposición y se han exigido responsabilidades y propuesto medidas.
Por otra parte, es cierto que yo no coincido con la actitud de los socialistas madrileños durante esta crisis de ofrecerle a Díaz Ayuso un pacto para aprobar los presupuestos. No coincido con eso porque, en primer lugar, si el Gobierno de la Comunidad de Madrid está débil porque no puede acordar con Ciudadanos y con Vox no es algo malo para nosotros, pues puede hacerla caer más pronto que tarde, porque no se puede gobernar sin presupuestos y Díaz Ayuso no los puede aprobar ahora mismo.
En segundo lugar, creo que eso sería quitar el debate político de la Asamblea de Madrid. Nosotros podemos ser muy respetuosos en las formas, pero en los contenidos nuestro proyecto es antagónico al de Díaz Ayuso. Lo que se necesita ahora mismo son unos presupuestos sociales acompañados de una reforma fiscal que permita garantizar los servicios públicos. Esto, por mucho que le demos la mano a Díaz Ayuso, ella no lo va a hacer.
- ¿Es partidaria de intentar una moción de censura a Díaz Ayuso después del verano? ¿Lo ve viable?
"Díaz Ayuso es la peor presidenta que ha tenido la Comunidad de Madrid"
- En primer lugar, esa moción de censura tendría que estar basada en el debate de las políticas, del programa, no de personas. Evidentemente, creo que Díaz Ayuso es la peor presidenta que ha tenido la Comunidad de Madrid y que hay que superar esta fase, pero lo importante es hablar de políticas para que, si conseguimos cambiar el Gobierno, sea para cambiar también de políticas. Me encantaría poder echar a Díaz Ayuso y apoyaría una moción de censura, ahora, creo que a día de hoy no es posible, creo que Ciudadanos está plegado a Díaz Ayuso, por sillones o porque comparten proyecto político.
Presentar una moción de censura que no vaya a salir, puede incluso reforzar a Díaz Ayuso. Hay que hacer lo posible para que en el año 2023 echemos por fin al PP y no den mayoría las derechas. Esto lo está consiguiendo Ciudadanos por sí mismo, no solo pactando con la extrema derecha, lo que le ha liquidado como proyecto a nivel estatal, sino también subsumiéndose al PP. Esa estrategia es la del PP para, precisamente, acabar con Ciudadanos. Desde la izquierda, tenemos que trabajar para conseguir echar al PP. En todo caso, si hay una moción de censura a Ayuso la apoyaremos, pero con cierto pesimismo actual respecto a que salga adelante.
- Hay un debate sobre fiscalidad, sobre aumentar los impuestos a los que más tienen para sufragar los gastos y el endeudamiento derivados de esta crisis. ¿Es la Comunidad de Madrid una suerte de paraíso fiscal, como se le tacha desde algunas otras comunidades autónomas? ¿Qué proponen para combatirlo?
"La Comunidad de Madrid es un paraíso fiscal para los ricos"
- La Comunidad de Madrid es un paraíso fiscal para los ricos. Díaz Ayuso, antes de esta crisis, pues siempre se ha querido construir como perfil estatal contra el Gobierno de coalición, ya estaba abanderando esta pelea respecto a la reforma fiscal que se proponía desde el Gobierno en términos de armonización fiscal. Sí, creo que es un paraíso fiscal para los ricos y lo que Díaz Ayuso trata, cuando pelea a nivel estatal, es decir que tiene que se tiene que seguir haciendo dumping fiscal desde la Comunidad de Madrid, lo que supone que los andaluces y los extremeños paguen las rebajas que hace aquí a sus amigos los millonarios.
Ahora se ha puesto sobre la mesa que hace falta una mayor justicia fiscal, pero ella ha recurrido una y otra vez a las donaciones y hacer publicidad a personas como Florentino Pérez o Amancio Ortega invisibilizando a todas las pymes y personas que han apoyado también en esta crisis. Yo creo que los servicios públicos no pueden depender de que un millonario decida donar en un momento concreto, sino realmente haciendo una reforma fiscal en la Comunidad de Madrid que grave el impuesto de sucesiones y de patrimonio, los cuales están bonificados casi al cien por cien. Lo que decimos es que no puede ser que los patrimonios de más de un millón de euros no aporten a las arcas del Estado. Cambiar esto mejoraría la sanidad, educación y dependencia. Díaz Ayuso siempre intenta convencernos de que la Comunidad de Madrid es la región de la libertad. Pues no hay libertad si no hay igualdad, y no hay igualdad si no hay servicios públicos. Esto se consigue con una reforma fiscal.
- Durante su permiso por maternidad, el pasado 23 de abril, se conocía que el Tribunal Superior de Justicia de Madrid le condena a 19 años de prisión por participar en las protestas contra un desahucio en 2014. ¿Cómo valora la acción de la Justicia en este sentido? ¿Qué recorrido tiene, a partir de ahora, su defensa?
"La sentencia crea un mal precedente que criminaliza la protesta"
- Es una sentencia desproporcionada e injusta. No me esperaba que pudiesen concluir algo así. Sí que me esperaba que intentaran criminalizar la protesta por una condena sobre desórdenes públicos, porque ya he visto muchos casos en el pasado de activistas sociales que han sido criminalizados y no me habría sorprendido una sentencia aleccionadora, pero esta sentencia ha sido un sinsentido. Los argumentos que da no hay por donde cogerlos. Voy a recurrir al Tribunal Supremo, espero que eche para atrás esta sentencia. Es algo que me perjudica a mí, pero como ciudadana, pues me deja en una situación de indefensión e impotencia ante una institución como la justicia que tiene tanto poder y tanta legitimidad y fuerza como para convencer a la gente de algo que es mentira, como que yo he cometido esa serie de delitos.
Más allá de mí, esta sentencia crea un mal precedente que criminaliza la protesta. Hemos visto en muchas ocasiones la represión y criminalización de la protesta, pero aquí hay un factor nuevo que es esa forma de imputarme a mí todos los hechos de ese desahucio, independientemente de que yo no los haya realizado. Esto se refleja así en la sentencia, se me aplica el delito masa, decir que soy coautora simplemente por pasarme por un desahucio de mi barrio. Creo que no solo es perjudicial para mí, sino para el derecho a la manifestación y el conjunto de los movimientos sociales. Espero que se eche para atrás, lo veremos dentro de unos meses. Tengo claro que lo que yo estaba haciendo ese día era defender los derechos humanos, es lo que pretendo hacer a día de hoy en las instituciones, y esto tiene por objetivo callarnos y amedrentarnos.
- Jesús Santos opta a ser el nuevo secretario general de Podemos Comunidad de Madrid. El partido en Madrid, especialmente, ha sido campo de confrontaciones internas durante los últimos años. ¿Qué le parece la candidatura de Santos? ¿Qué propone para que a partir de ahora se garantice la unidad y tenga voz la pluralidad?
"Se le da valor a los militantes y a los círculos"
- A pesar de que la III Asamblea Ciudadana estatal haya pasado desapercibida, creo que ha habido cambios importantes en el modelo organizativo que no se han contado hacia afuera porque no ha habido la forma de hacerlo en medio de esta crisis. Ese cambio me parece muy importante y lo quiero poner en valor. Ha habido un problema en Podemos siempre, la estructura organizativa no permitía diferenciar entre un dentro y un fuera, es decir, todo se decidía por los inscritos y los debates eran muy mediados a través de los medios de comunicación. Hay una parte de esto que es bueno, el abrir las organizaciones políticas a la ciudadanía, pero hay otra parte que puede ser perjudicial, que no haya un espacio de calma y debate sosegado entre los compañeros de la organización.
Este paso en la Asamblea Ciudadana es importante. Los militantes tendrán la capacidad de tomar decisiones y en algunas cuestiones solo la tendrán ellos. Se le da valor a los militantes y a los círculos. Ahí el plano municipal cambia, ya no habrá consejos ciudadanos municipales, sino coordinadoras de círculos. Creo que esto es importante para favorecer el debate, porque muchas veces se ha priorizado la lucha cainita por puestos a través de medios de comunicación, si no se conseguía un acuerdo dentro se buscaba la bronca fuera. Espero que esto fomente más el debate de la militancia y esto se aplique en la Comunidad de Madrid.
Más allá de eso, en Podemos Comunidad de Madrid venimos de una situación difícil, no solo por el momento previo a las elecciones y los posteriores resultados, sobre todo con la marcha del secretario general se quedó una situación difícil para la organización. Creo que lo que tenemos que hacer ahora es reconstruir esa organización, haciéndola mejor que antes, y para eso debemos llegar a un acuerdo entre las diferentes sensibilidades y culturas políticas que coexisten. Así, tendremos una organización fuerte que apueste por la construcción de Unidas Podemos en el nivel autonómico para echar al PP en el 2023.
Siempre hay que tener en cuenta una cuestión importante políticamente. Asumiendo que estamos gobernando con el PSOE en minoría, ese no es nuestro objetivo. Hemos dado muchos pasos y es importante que estemos en el Gobierno estatal, pero nosotros somos alternativa de gobierno, somos un proyecto pensado para gobernar como Unidas Podemos.
- En las últimas elecciones autonómicas y municipales, las izquierdas se presentaron divididas en Madrid. ¿Debe Unidas Podemos buscar puntos de entendimiento y trabajo conjunto con Más Madrid?
- Sí, desde luego. Ahora mismo necesitamos fortalecer Podemos. Tenemos que tejer alianzas, desde luego con IU en Unidas Podemos, pero también con Más Madrid y, en casos puntuales, con el PSOE. Es importante recordar que en el año 2015 dimos un paso de gigante asumiendo las diferentes candidaturas de unidad popular que exceden los partidos como Podemos o IU y es fundamental también pensar en toda esa parte y estar al servicio de los movimientos sociales y fortalecerlos para que, cuando nos encontremos en posiciones de gobierno, nos empujen y nos hagan llegar más lejos a todos.
Con respecto a Más Madrid, hay que llegar a acuerdos puntuales. Es muy pronto para ponernos a hablar del año 2023 en esos términos, pero habrá que afrontar esos debates. Esos debates se tienen que afrontar en torno al programa y proyecto político y ahí yo tengo ciertas diferencias con Más Madrid. Me parecen diferencias sanas. Por ejemplo, en esta crisis, Más Madrid, en el Ayuntamiento, ha mantenido una posición con respecto a Martínez-Almeida. Las formas son importantes, pero más importantes son los contenidos. Almeida puede parecer mejor que Ayuso, porque Ayuso hace bueno a todo el que se le ponga al lado, pero decirle que tiene entregados los votos de la oposición es darle legitimidad, hacer que su voz tenga más espacio y reconocimiento por parte de mucha gente, y Almeida es discípulo de Esperanza Aguirre, quien se ha cargado los servicios púbicos, ha privatizado la sanidad y ha generado tanta segregación en la educación. Lo que necesitamos no es legitimar esas voces y proyectos, sino una oposición firme que permita sacarles del Ayuntamiento y la Comunidad de Madrid en el 2023.
Me da la impresión que la «izquierda transformadora» situada a la izquierda del PSOE ha caído en la trampa de estar demasiado pendiente de las citas electorales. Concretamente, la necesidad de aglutinar fuerzas le suele surgir precisamente y con prisas en vísperas de las citas a las urnas. ¿No sería conveniente ir desde ya constituir una plataforma/coordinadora de acción política y programática entre todos los movimientos sociales y progresistas para ir conformando un PROGRAMA POLÍTICO que serviría de base tanto para la acción política del día a día como para afrontar las eventuales citas electorales. Esto allanaría el camino para una futura UNIDAD de las fuerzas progresistas y poder evitar así las habituales peleas cainitas en los momentos más inoportunos.