ANÁLISIS
El éxito de los soberanismos de izquierdas, explicado en tres claves
- Los soberanistas BNG y EH Bildu firman resultados históricos en las elecciones y serán el cambio de izquierdas frente a un Podemos que se deshace
- Han adaptado sus proyectos al contexto, con más demandas sociales y dos mujeres solventes poniéndoles rostro y voz en las instituciones
"El voto del futuro es el voto a la izquierda soberanista". Es la conclusión a la que llegó el coordinador general de EH Bildu, Arnaldo Otegi, en una entrevista en Radio Euskadi en la que comentaba los resultados de las elecciones autonómicas del pasado domingo. Con 22 escaños en el Parlamento vasco, Bildu es la oposición al futuro gobierno de PNV y PSE-EE. Lo mismo ocurre con el BNG, que con 19 escaños será la alternativa al PP en Galicia. Ambas formaciones soberanistas han apuntado resultados históricos mientras Podemos y sus marcas del cambio se desploman aunque los expertos consultados apuntan a que, más que una novedad, se trata de una vuelta a lo conocido y una actualización de los proyectos. Su éxito es mucho más que la caída de Podemos.
Los resultados de ambas escaladas electorales tienen que ver con circunstancias coyunturales, como la caída de Elkarrekin Podemos en Euskadi y Galicia En Común-Anova Mareas, pero también con la renovación de las estrategias que se han revelado capaces de atraer a un electorado más amplio. Sus dos líderes Maddalen Iriarte (EH Bildu) y Ana Pontón (BNG), que representan liderazgos sólidos y pragmáticos, han tenido mucho que ver con sus ascensos.
Analizamos el cambio de discurso y estrategia de estos partidos, que han sabido adaptarse al contexto electoral y presentar un proyecto trasversal que desborde la esfera nacionalista. Ambas son ya la alternativa al Gobierno de sus comunidades autónomas.
La penetración territorial: la clave
Tanto BNG como EH Bildu tienen una característica que ni Podemos, ni sus mareas gallegas han logrado consolidar, pese a que crecieron en espacios con cierta articulación social: la penetración territorial y la creación de un partidos arraigado en Galicia y Euskadi. "La estructura territorial no te hace ganar elecciones, pero te permite no caer demasiado", explica la politóloga Berta Barber, editora de Politikon. Esta coalición le permitió a Bildu resistir la mordida de Podemos en 2016 y al BNG aguantar una larga travesía política que se inició con las disputas internas y la marcha de Xose Manuel Beirás en 2012 para fundar Anova. Ahora, bajo la batuta la candidata Ana Pontón son la segunda fuerza gallega.
Por tanto, para estos analistas no es un voto que se haya fugado de Podemos a los soberanistas, sino que estos electores ya "eran sociológicamente votantes de partidos a la izquierda del PSOE" antes del nacimiento de Podemos, tal y como asegura Barber, que recuerda que a la izquierda de los socialistas ya había más fuerzas que IU. Aunque el BNG pasase una etapa de crisis interna, mantenía la penetración territorial. En el caso de las mareas, las estructuras han triunfado en el terreno electoral, pero se han revelado débiles en la parte organizativa. Ahora acusan el desgaste de las disputas internas.
"No me sorprende, es volver a los resultados que había en el País Vasco antes de Elkarrekin Podemos", coincide Javier Tajadura, profesor Titular de Derecho Constitucional de la Universidad del País Vasco, sobre el espacio recuperado por EH Bildu en 2020.
Ni siquiera la abstención, que sí ha afectado al PSE-EE, ha rebajado los votos de los abertzales, que han logrado movilizar a sus electores para que salieran incluso con la amenaza de la covid-19: "El votante de Bildu tiene una fidelidad de voto absoluta. Están movilizados permanentemente. Es un partido más ideologizado", asegura el profesor sobre el férreo anclaje. El catedrático también habla del reverso de la moneda: "No van a gobernar. Es difícil que el PSOE apoyara a Bildu".
Proyectos renovados en discurso y liderazgo
"¿Qué cambio hay más importante que poner a una mujer feminista y nacionalista al frente de la Xunta?", se preguntaba Ana Pontón en una entrevista de campaña para cuartopoder, en la que establecía tres grandes problemas a solventar: la crisis demográfica, el debate medioambiental y la identidad gallega. Por ese orden. Es un buen ejemplo del la renovación de discurso y liderazgo del BNG, que intercala las demandas materiales (como la política industrial o el futuro económico) con los debates actuales (feminismo, ecologismo...) y con la cuestión identitaria, que no ha desaparecido pero no eclipsa las demandas sociales. En definitiva, la promesa de "una nueva Galicia", como la llaman en el BNG, adaptada al contexto actual.
Esa renovación de los discursos ha tenido premio en las urnas: tanto en el caso de BNG como en el de Bildu aseguran que han incorporado buena parte del voto joven. El propio Otegi, en la mencionada entrevista reconoce que la propuesta de EH Bildu no es "hegemónica", pero sí dibuja un "país de futuro" atractivo para los jóvenes. El líder abertzale habla de una Euskadi "soberanista", pero también ecologista, feminista, que apuesta por estilos de gobernanza más democráticos, por las pensiones dignas o porque "los cuidados formen parte de la administración pública". De nuevo, aparece una amplia oferta social, en este caso, adaptada a la agenda vasca.
Esta nueva generación de votantes también parece menos permeable al discurso que vincula a EH Bildu con la historia de ETA, hoy disuelta. Los nuevos electores vascos han crecido en una atmósfera completamente distinta a la de sus padres, sin que el miedo al terrorismo influya en su papeleta.
En el Congreso, perfil soberanista sin obstaculizar la gobernabilidad
Otegi confirma que EH Bildu apuesta en sus acciones por el "principio de realidad". Desde el BNG también reconocen que comparten con las fuerzas nacionalistas catalanas y vascas la concepción de una España plurinacional, pero a la hora de diseñar una campaña electoral, las prioridades son distintas y se adaptan a cada territorio. En Galicia han optado por hablar de los sectores productivos gallegos, de la gestión de la energía o de demografía. Precisamente, creen que uno de los problemas del PSOE y Podemos es no tener un proyecto para Galicia y seguir las instrucciones de Madrid. Aún así, tanto el BNG con su escaño como Bildu con sus cinco actas han apostado por no obstaculizar la acción de gobierno de Pedro Sánchez.
Como ejemplo paradójico, el caso de Alexandra Fernández. El febrero de 2019 decidió obedecer las instrucciones de En Marea siendo diputada morada en el Congreso y desmarcarse de las votaciones de su grupo en el Hemiciclo, votando en contra del proyecto de Presupuestos Generales del Estado. La diputada rechazó las cuentas que recortaban un 20% a Galicia, mientras sus compañeros de bancada votaron sí junto al resto de Unidas Podemos. Finalmente, acabó abandonando el Congreso poco después. Sin embargo, decidió presentarse en las listas del BNG para las autonómicas de 2020 y ahora será diputada en la cámara autonómica bajo estas siglas.
En el caso de Bildu, no es casual que el último gran titular que protagonizaron en el Congreso de los diputados fuera la negociación con el Gobierno de la derogación íntegra de la reforma laboral a cambio de su abstención en la quinta prórroga del estado de alarma. Para el PSOE fue una polémica mayúscula, con rectificación nocturna incluida. Sin embargo, a Bildu le permitió llevar su mensaje a los titulares de los periódicos digitales: las exigencias no eran identitarias, sino puramente laborales.
Interesante y acertado análisis, en mi opinión.
En realidad, para ser justos habría que decir que las bases fueron plantadas por el acertado análisis de Podemos en su nacimiento, el problema es que luego la praxis ha sido incoherente y y han ido abandonando uno a uno sus postulados.
Una de las claves era la descentralización/desmadrilización (referido a corte y concepto, no a villa/pueblo/territorio).
Addendum: Si Teresa Rodriguez es lo suficientemente inteligente como creo, posiblemente veremos crecer (probablemente con éxito) una nueva herramienta con este perfil en Andalucía.
P.D.: Los cambios y el futuro vienen desde ‘Las Repúblicas’
… Parece ser que «solo» ha perdido Unidas Podemos. Son unas elecciones «Autonómicas» y se diferencian muchísimo de las «generales». Los territorios son diferentes, y las personas también. Luego está la ley Dont, que hace la selección primando al mayoritario.
El PsoE en Galicia y Euskadi, han bajado y no se han beneficiado por estar gobernando en el Estado. Los años de usar los medios para hacer política (con la excusa del terrorismo)… cuándo está sin desclasificar nada del ejercido y subvencionado con dinero del contribuyente. Con una gran abstención, que también les frena en la participación y los medios «forales» en manos del PNV-PsoE coaligados «por varias necesidades antiguas». Se han guardado el escaño por Bizkaia, que parten con una ventaja los abertzales de 138 votos, que seguro no son suficientes ¿por ?. Hay que evitar la posibilidad de que sumen la izquierda y comprometan el «pacto» entre el «regionalismo vasco» y los comparsas del antiguo «bipartidismo» estatal con el PsoE; excesivamente calculado, por ser esos partidos un conglomerado filial de: obras, proyectos, prevaricaciones S.A.
Ver ganar a Feijoó y verlo en el «yate» de y con un narcotraficante… se escapa al análisis normal en una sociedad normal. Que esa «nacionalidad», tan sacudida por las «drogas», «el Prestig» y tantas violaciones de personalidad del mismo idioma, puedan votar a una mayoría (la misma) que los trajo hasta aquí… ¡Algo falla!, la memoria, los egos, divisiones y el corrimiento entre los más próximos en el ideario político.
Hay que hacer una corrección al comentario de Sara: «el PNV ganó aquellas elecciones con Ibarretxe de Lehendakari, pero… Aquí entran los «fácticos» «factores» de aquel «bipartidismo» de PP+PsoE…anularon a Euskal Herritarrok y su 15 % de voto. Juntando el «bipartidismo» del PsoE-PP… ¡ hizo posible el Paco López Lehendakari !. El reparto de las parcelas económicas, su gestión y cuándo vienen mal «dadas»… vuelta a empezar !.
El comentario anterior de una compañera «opinadora», hablando de «las repúblicas»… cuándo estamos en una monarquía parlamentaria, diseñada, elegida… ¡ por designación real !. Unos sueños que vuelven a dividir, la fuerza que debiera aglutinar la mayoría que la pudiera llevar a cabo. Hay excesivo trabajo por desarrollar a medio plazo… y ¡ hay que mancharse !.
No creo se trate de dividir, ‘compañero opinador’ (sic)… sino de diagnóstico y estrategia acertadas/adecuadas. Sin acritud, porque habitualmente le suelo leer con atención, interés y respeto. Salu_2 republicanos, periféricos, descentralizados y solidarios
Todo el que pretenda » contrariar…» a este penoso y ya moribundo régimen pseudo democrático que padecemos en la plenitud del S. XXI ( año 20´5); pasa a ser un objetivo a batir y eliminar .Con respecto a la P$(-) € nada más hay que pararse un momento y ver la nefasta ( para España ) y vergonzosa trayectoria ( para sus votantes socialistas) que les marco el mafioso de Felipe González (Sr. Cal viva, Mr. X , el «compañero.» Isidoro ……………) , y que no solamente se encargo de desmantelar el verdadero PSOE eliminando la auténtica amenaza de cambiar el rol de este país cortijero y meapilas , si no que además se » cargo también) el paupérrimo tejido industrial y productivo del país.
Salud amigo y cada vez más próxima 3ª República de Repúblicas de España.
… Saludos Magdalena !… republicanos de las «repúblicas» que conviven en este Estado. Sería un gozo ver asentado en Andalucía un «abertzalismo» (patriota) «andalusí», lavando una imagen del creador de la Patria Andaluza Blas Infante; vilmente asesinado por los sublevados militares que juraron otra constitución, otra bandera… cuarenta años de dictadura y otros cuarenta de propina. Que de la misma han salido tantos atropellos sociales y monarcas «evasores» del sudor ajeno.
La citada Teresa bién pudiera ser la aglutinadora… coincido en que sí, pero con un pero que habrá que solventar en las urnas; Magdalena, las «etiquetas» si te las pone el «régimen», para soltarlas… «anticapitalistas». Ojala, llegáramos a comentar ese triunfo. Pero viendo el contexto actual, me llena de dudas al comprobar cómo actúan los medios mediáticos, y las entendederas de los votantes; amiga, hay mucho que reciclar, muchos «egos» que han mellado la «herramienta» de Unidas Podemos. Creo que los líderes se encontrarán… ¡ fijo !.
Magdalena un saludo, por ser como eres, yo soy «opinador» por este lugar y seguro que nos encontramos !. Salud y Repúblicas !.