LAS CONSECUENCIAS DEL COVID-19
Política para después del coronavirus: del impuesto covid-19 a la modificación del artículo 135
- El Ejecutivo ya ha empezado a tomar decisiones para procurar que la crisis del coronavirus tenga forma de V y no de L, pero requerirán un horizonte político
- El presidente ya pide el apoyo para unos PGE en 2021 de "reconstrucción", ERC propone un impuesto especial y Más País pide un Green New Deal en la UE
"Hay que hacer lo posible y lo imposible para que esta crisis sea lo más corta en el tiempo". Así alertaba el líder de CCOO, Unai Sordo, sobre la situación de extremada delicadeza en la que ha dejado (y dejará) la crisis del coronavirus a España, a la Unión Europea y al mundo. El sindicalista vasco daba una rueda de prensa el pasado jueves junto a Pepe Álvarez, secretario general de UGT. Cuando la crisis sanitaria se frene, tocará abordar las consecuencias económicas y sociales a medio y largo plazo. Los grupos políticos se centran hoy en la urgente, pero durante este mes han surgido algunas ideas sobre qué hacer después, cuando las medidas de contención acaben. El Ejecutivo ya ha empezado a tomar decisiones para procurar que la crisis del coronavirus tenga forma de V y no de L, pero requerirán un horizonte político. En este artículo, cuartopoder selecciona algunas de las propuestas políticas para la "reconstrucción" poscovid-19.
En las dos últimas semanas, todo se ha paralizado. Lo importante ha claudicado ante lo urgente y los partidos políticos han centrado todas sus propuestas en frenar los contagios y las consecuencias socioeconómicas. Además, España mira hacia la Unión Europea, donde se discute la creación de los coronabonos o el uso de instrumentos como el fondo de rescate europeo. Pedro Sánchez ya ha pedido un gran "plan Marshall" para impulsar un proceso de reconstrucción social y económica en la región.
Los pilares sociales de esta crisis comenzaron a fraguarse en el decreto del pasado 17 de marzo por el que el Ejecutivo movilizaba 200.000 millones de euros. El Gobierno ha ido actualizando sus medidas, con propuestas como el 'escudo social' o la imposibilidad de despedir a los trabajadores temporales durante la crisis. En todo caso, lo primero es salvar vidas. "De momento pensamos en cómo ayudar a los ciudadanos con las medidas que ya hemos propuesto para ayudar autónomos, PYMES o el decálogo que presentamos·,explican desde Ciudadanos preguntados por el después.
Debates poscovid-19
Sin embargo, en las intervenciones de los líderes políticos aparecen algunas pinceladas de los debates que se abrirán cuando acabe la crisis sanitaria. El más obvio será la importancia de reforzar lo servicios públicos del Estado, verdaderos salvavidas en esta crisis, que se han saturado en algunas Comunidades Autónomas. Grupos como Vox se han descolgado con otras propuestas, como que los inmigrantes en situación irregular paguen por la prestación médica derivada del coronavirus.
Sin duda, el debate territorial también tomará una nueva óptica después de que las competencias hayan estado centralizadas durante el Estado de alarma bajo el mando del Gobierno central, una decisión que suscitó el recelo de Euskadi y Cataluya. Los trastornos generados por tener que importar material sanitario básico como las mascarillas o la necesidad de una renta mínima también exigen de reflexiones profundas que pueden abordarse o guardarse en un cajón.
Mejorar el sistema de residencias, que se ha revelado como uno de los agujeros negros de la pandemia, y cómo impulsar la ciencia deberían estar también entre las prioridades de los representantes públicos.
Durante los últimos 20 días, los grupos políticos han hecho multitud de propuestas, especialmente, en los debates del Congreso.Estas son algunas de las que permiten adelantarse a posibles debates futuros cuando todo esto pase.
El Gobierno y los presupuestos de "reconstrucción" para 2021
Los partidos políticos ahora están en lo urgente. De no ser por el covid-19 y con los Presupuestos Generales del Estado (PGE) de 2018 prorrogados, Sánchez hubiera tenido que abordar una complicada negociación para las cuentas de 2020 con un Congreso fragmentado y con la tensión de las elecciones autonómicas en Galicia, País Vasco y Catalunya presionando a los partidos, especialmente ERC. Con un proyecto complicado para 2020, los grupos habrían girando la mirada directamente a 2021.
Sin embargo, el presidente del Ejecutivo aprovechó el pasado 18 de marzo para anunciar unos Presupuestos 2021 de "reconstrucción social y económica", llevando el mensaje de la unidad a las cuentas del Estado: "Queremos contar con el apoyo de todas las fuerzas políticas".
Los socialistas también aprovecharán la revalorización social de los servicios públicos que ha supuesto el coronavirus para avanzar en el refuerzo del Estado del Bienestar, que exigirá tocar aristas en los que los partidos suelen chocar, como los impuestos: "El debate fiscal yo creo que ya no va a ser nunca el mismo", fantaseaba el presidente. Para atar esta promesa, anunció que propondrá "una comisión de estudio" sobre la sanidad pública para evaluar su situación.
Por otra parte, se mantiene la expectativa sobre si el gobierno de coalición adelantará una de sus medidas más esperadas en versión de urgencia: la renta mínima.
El PP: oposición hiperpropositiva
Además de críticas al Gobierno, los de Pablo Casado han desplegado una oposición de apariencia más constructiva en el Congreso, registrando más de 500 iniciativas . La oposición también se hace desde las Comunidades Autónomas, como en el caso de Madrid.
Aún así, en el PP saben que la catarsis que ha provocado el coronavirus puede tambalear algunos pilares políticos. El diputado Mario Garcés exigía el pasado miércoles que la crisis no sea "una oportunidad para que determinados aliados de su Gobierno consideren que existe una puerta abierta para un cambio de modelo económico o de modelo de libertad".
Los populares le han pedido al gobierno la exención de la cuota de autónomos de este mes, la reducción al menos del 50% del Impuesto de Sociedades de las empresas afectadas, la ampliación del plazo de liquidación en el caso del IVA o la ampliación del plazo de presentación y liquidación de la renta, entre otras muchas para paliar la crisis.
ERC y el impuesto covid-19
Desde ERC avisan a cuartopoder. La prioridad ahora es "salvar vidas" y "proteger a nuestros sanitarios" y después será "la reconstrucción": "Todo el presupuesto disponible tiene que ir a todas estas medidas si hace falta a través de la emisión de deuda pública que el Banco Central Europeo ya ha anunciado que comprará", explica el diputado Joan Margall a cuartopoder
ERC apuesta porque sean las grandes compañías las que arrimen el hombro para combatir la crisis social a través del "impuesto covid-19", un impuesto "extraordinario, solidario y temporal sobre todas aquellas compañías digitales e intermediarias de distribución y reparto que están viendo aumentar estos días su volumen de negocio exponencialmente". Este tributo podría gravar, por ejemplo, a plataformas como Glovo mientras durase el confinamiento.
Pero para después de la crisis, ERC también tiene otra propuesta impositiva: un impuesto extraordinario, solidario y permanente para las grandes fortunas: "Ya durante la crisis-estafa del 2008 se debatió sobre ello e incluso gente inmensamente rica como Warren Buffet y Bill Gates lo propusieron. Los que más tienen deben colaborar en un momento de crisis global como este", apunta Joan Margall.
Los republicanos también proponen modificar la Ley de Estabilidad Presupuestaria y ampliar el margen de los ayuntamientos para que su superávit pueda dedicarse a la lucha contra el virus. El Gobierno les dio un margen fiscal de 300 millones: "Sólo en 2018 los Ayuntamientos declararon más de 6.000 millones de € en total de superávit. Es un dinero que pertenece a la ciudadanía y no tiene ningún sentido que por rigidez fiscal esté en un banco y no en un programa de ayudas sociales a nivel local".
Los catalanes no ignoran tampoco el repliegue nacional. Con el estado de alarma, las competencias sanitarias se recentralizaron bajo el mando del ministro de Sanidad, Salvador Illa, con algunos errores, como la compra de material defectuoso a una empresa a china. Por eso, piden que se tenga en cuenta a las autonomías, con experiencia de gestión y compra: "La centralización que se ha producido durante esta crisis no garantiza unos mejores resultados sino al contrario, puesto que se renuncia al bagaje acumulado por administraciones autonómicas y locales".
El diputado también cree que la emergencia ha supuesto que se desmonte el discurso neoliberal "como un castillo de naipes": "La importancia de los servicios públicos ha quedado más de manifiesto que nunca en esta crisis sanitaria. Incluso hemos visto a adalides del neoliberalismo hablar de nacionalizaciones de sectores estratégicos".
Además, este mismo lunes, ERC ha registrado una Proposición no de Ley en el Congreso para ampliar los créditos en investigación científica y el desarrollo en relación al control de enfermedades contagiosa.
PNV y el sistema internacional de alerta
El PNV ha pedido en el pleno de control una “renta de garantía pública con carácter transitorio" para los colectivos desfavorecidos, medidas para pymes, micropymes y autónomos o la agilización de los ERTE.
Pero los jetzales acostumbran a mirar más allá. En el primer pleno, propusieron que se cree “un sistema internacional de alerta y prevención de crisis sanitarias” a nivel mundial para controlar futuras epidemias en un mundo sin fronteras y con continuo movimientos de personas. Eso supondría ir más allá de las competencias de la OMS.
Además, el PNV ha reclamado a Sánchez durante los debates en el Congreso un Plan de recuperación con medidas fiscales y económicas para evitar caer en "un coma económico" si la crisis se alarga en el tiempo.
Más País-Equo: Plan Marshall y modificar el 135
Ese mismo día, el líder de Más País-Equo, Íñigo Errejón, propuso un paquete de medidas de gran calado más allá de la crisis sanitaria, sugiriendo, incluso, modificar el artículo 135 de la Constitución para anteponer el gasto social a la deuda pública. Sobre esta última, proponen decretar una moratoria de pago y la suspensión temporal de la Ley de Estabilidad Presupuestaria.
"No puede ser que un Gobierno progresista sea más tímido que uno liberal como el de Macron”, defendía sobre la necesidad de que el Ejecutivo hiciera una gran inversión pública al estilo del Plan Marshall. Durante los debates, el partido de Errejón también ha propuesto un Impuesto de Solidaridad Cívica a las grandes fortunas. Además, proponen un Ingreso Básico de Emergencia para "toda la ciudadanía con una duración de hasta 6 meses después de que se acabe el confinamiento", tal y como explican en el documento Cuidar España: salir adelante en comunidad. En esta misma hoja de ruta insisten en un Green New Deal para Europa.