Pocos políticos escapan a la falta de aprecio de la gente, aunque visto lo visto el sábado por la mañana en Vallecas se comprende que Alberto Garzón sea el más valorado en las encuestas. El observador se encontró un buen puñado de “garzonistas” entre las casi dos mil personas que asistieron al mitin del coordinador general de Izquierda Unida (IU), quinto de la lista madrileña de Unidos Podemos. Y conste que algunos no eran de IU, sino de la tribu hermana de Pablo Iglesias. A Garzón le llovieron aplausos. Y también piropos: “¡Guapo, bravo, valiente!”
¿Qué puede llevar a un viejito de más de ochenta años a escuchar a un joven de treinta? “Lo primero, el deber para con los míos, a los que voto siempre, y lo segundo que es que este chico habla muy bien, es correcto y no se mete con nadie”, dice Juan, sentado en un banco del parque del auditorio Villa de Vallecas, a la espera de que empiece el mitin. ¿Y a unas jóvenes que no han cumplido los 18 y ni siquiera pueden votar?, pregunta el observador a Valentina, Alicia y Patricia, que están sentadas en el suelo, a la espera de ver y oír a Garzón. “Nos gusta”, coinciden. ¿Por el logos o por el ethos?, inquiere el observador, sospechando que saben latín. “Por lo que dice y por como es”, responde Valentina, a la que falta un año para poder votar. “Pero no me importa; yo creo que rebajar la edad del voto a los 16 sería un error porque muchos compañeros no tienen ni idea de nada y acaban votando a las derechas”, argumenta.
Quien tiene idea clara de a quien votar es Luis, que ha acudido al mitin en compañía de Jenifer, y ejerció su derecho por primera vez en diciembre pasado. “Hay que votar a IU para acabar con las políticas del PP contra los trabajadores y la gente humilde”, explica. Cuando el observador le corrige: “¿A Unidos Podemos quieres decir?”, asiente, pero explica: “Yo soy más de IU, de Garzón”. No espera que el PSOE se sume a la transformación. “Dan asco, mira lo que hicieron con el 135 de la Constitución”, añade en referencia a la reforma constitucional pactada por Zapatero y Rajoy anteponiendo la reducción del déficit y el pago de la deuda a la educación y la sanidad. Jenifer añade: “Somos pobres, somos de una familia trabajadora, pero mi padre dice que más vale lo malo conocido que lo bueno por conocer y vota al PP”. En el actual contexto se conforman con que la unión de IU y Podemos pase a ser la primera fuerza de la oposición.
Mientras el vecino y eurodiputado Javier Couso presenta sobre el escenario del anfiteatro al aire libre a la siguiente oradora –la también eurodiputado Marina Albiol– en un una esquina de los anchos escalones a modo de grada Oscar agita las banderas de IU y del corazón electoral con los colores del arco iris. “Apoyo la unidad por la que ha optado Garzón; nos juntamos los trabajadores porque el PSOE, siempre que ha podido, se ha ido con la derecha, de modo que Unidos Podemos es el verdadero partido de izquierda, y el PSOE, por la cuenta que le trae, lo acabará entendiendo y apoyando un gobierno de izquierda”. A Oscar le gusta Garzón porque “es una persona de izquierda, no un pijo de Pozuelo como Pedrito”.
Jone, Beatriz, Antonio y Eder (su perro Lorca no habla) se declaran “garzonistas”. ¿Por qué, si se puede saber? “Porque Alberto dice lo que nosotros pensamos”, contestan. Sobre el escenario, el número cinco de la lista por Madrid ha comenzado a hablar: “No somos anti sistema, el sistema es anti nosotros”. Se refiere a los saqueadores del país, a los que no les ha importado echar a la gente de sus casas, de las viviendas sociales en Madrid, para forrarse como si el derecho a la vivienda no fuera un derecho humano. Se sorprende de que el PP sea todavía el partido más votado, según las encuestas, y añade: “No es comprensible que haya gente en el PSOE que prefiera al PP y a C's, salvo que sean de los que han saqueado”.
Garzón arranca aplausos. El grito de “¡El pueblo unido jamás será vencido!”, se repite una y otra vez ante sus afirmaciones: “Cuando hemos luchado juntos, hemos ganado” y “La confluencia llegó desde abajo, desde las calles y las plazas”. También arranca aplausos cuando se refiere a la pobreza y el paro. “No vayan a buscarla a Venezuela, pisen estas calles”, recomienda a los del PP y C's. El reproche a los medios de comunicación por abrir los telediarios con “un asunto de Venezuela nada claro” en vez de con las protestas sociales en Francia contra la reforma laboral de Manuel Valls, corresponde hacerlo a su compañera Sol Sánchez. Y lo hace ante la dirigente de la CGT de Ille de France, Camila Montuelle, que participa en el mitin.
Entonces María Jesús Añover y Eleni Beano, que ha vivido 32 años como emigrante en Francia, agitan sus banderas y gritan a favor de la lucha de la clase obrera. Beano dedica palabras gruesas como insultos a la derecha española, “que se ríe de nosotros y todavía quiere chupar más de nuestras pensiones” y pide a Unidos Podemos que acaben con los aforamientos de los políticos. Ambas son militantes de Podemos y apoyan a muerte la unidad “a ver si ahora que se lleva el reciclado –dice María Jesús-- conseguimos reciclar al PP y pasarlo por la piedra”.
El ambiente es de euforia. El número cinco lo aprecia y recomienda no fiarse de las encuestas e ir a votar. Afirma que, como ocurrió en Madrid, es posible ganar a la derecha. Lo nota no sólo en el ánimo que transmiten los que le escuchan, militantes y simpatizantes de IU en su mayoría, sino también “porque ya no dicen que soy un tío majo, sino un peligroso comunista. Y tienen razón, soy comunista, pero lo de peligroso tiene que ver con la posibilidad de que ganemos las elecciones y el miedo de algunos de acabar en la cárcel”.
Los aplausos despiden a Garzón, que entre abrazos hasta la puerta de la furgoneta no se percata de que el joven Eduardo le pide un autógrafo. Se lo firma su compañera Sol Sánchez en un cuaderno que el nervioso admirador guardará como oro en paño. La diputada de IU, ahora desplazada en la lista, le escribe unas cariñosas palabras también para Natalia, la novia de Edu, quien no ha podido matricularse en Historia en la Universidad porque sus padres no tienen dinero para pagar la matrícula. “Estoy haciendo un módulo en riesgos laborales y a ver si más adelante...”
Inexplicable que Podemos no de más cancha a gente de IU como Alberto y muchos más.