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La presidenta del PP en Madrid, Esperanza Aguirre, ha explicado este viernes que no le han llamado desde la dirección nacional de su partido después de los registros que tuvieron lugar ayer en la sede de la formación madrileña en el marco de la Operación Púnica y que se siente respaldada. Aguirre, que ha comparecido en la comisión de investigación de la Asamblea de Madrid sobre la corrupción, ha defendido en todo momento la transparencia de su gestión y refiriéndose a los portavoces de los grupos interpelantes ha subrayado que la corrupción "nos está destrozando a todos, incluso a los nuevos".
Esperanza Aguirre ha afirmado tener confianza en sus exconsejeros Salvador Victoria y Lucía Figar, ambos investigados en el marco de la Operación Púnica, y ha negado conocer que el primero ordenara que Indra pagara en B al empresario Alejandro de Pedro, considerado como uno de los 'conseguidores' de la trama.