El PCE ha terminado hoy su fiesta en San Fernando de Henares (Madrid) con uno de los actos más esperados de todo el fin de semana. El exsecretario general del partido y excoordinador de IU, Julio Anguita, ha participado en una charla junto al diputado y candidato Alberto Garzón; la coordinadora de IU en Galicia (EU), Yolanda Díaz; el secretario general del PCE, José Luis Centella, y la secretaria de la Federación Agroalimentaria de CCOO Esperanza Hernández. Anguita ha expuesto varios puntos sobre lo que considera debe ser la tan debatida “unidad popular”. En este sentido ha hecho especial hincapié en la necesidad de trabajar para rechazar la actual Unión Europea, la moneda única y el pago de la deuda. “No hay nada que hacer dentro de la actual UE. Hay que empezar a trabajar para salirse del euro y construir otra Europa”, destacó en su intervención.
Para el ex-dirigente de IU la llamada unidad popular debe ser capaz de señalar, definir y designar como adversario al “círculo de hierro de la UE”, la moneda única y la deuda. Ese sería el camino para el posible cambio en el país y para recuperar soberanía, según afirmó. En este sentido apuntó también a realizar, como una de las líneas de actuación, contactos con referentes de la izquierda europea como el griego Yannis Varoufakis, el francés Jean Luc Melenchón o el alemán Oskar Lafontaine, entre otros. Una política exterior común sería el objetivo en último término.
En términos similares se ha expresado Yolanda Díaz, que ha sido la primera en intervenir en el acto. Para ella estamos ante una “UE caníbal” donde “nos dejan votar pero no decidir las cuestiones vitales para la clase trabajadora”. Según ha comentado, ninguna fuerza política que ganara las elecciones puede tener margen de maniobra en la UE actual. “Los comunistas tenemos que discutir sobre el euro y la UE, para no engañarnos”, ha afirmado. Sobre la unidad popular ha pedido no frivolizar con ella. “No es hacer algo rápido para las elecciones sino convertirnos en mayoría social y subvertir el orden establecido”.
Otros aspectos relevantes comentados por Anguita en su concepción de la unidad popular es que no puede ser una “simple candidatura”. Esto, además, provoca una especie de “revista del corazón” que habla de candidatos, listas o alianzas. De hecho Anguita ha rechazado en todo momento, también hoy a preguntas de los medios antes de la conferencia, pronunciarse de forma concreta sobre la composición de una hipotético acuerdo entre Podemos e IU. También ha destacado que el mensaje no se puede sólo limitar a “derrotar al PP”. “No, hay que derrotar al PP, al PSOE y a CIU. El discurso de ir sólo contra la derecha condujo a pactos que ya sabemos cómo han acabado”, añadió. Además ha añadido que la construcción de esta unidad debe servir para realizar una “enmienda a la totalidad” que suponga un cambio real.
Todo ello se apoya en unos ejes programáticos que Anguita ha expuesto en varias ocasiones y que esta mañana ha vuelto a mostrar. Uno de los puntos destacados son un salario mínimo de 1.000 euros y una pensión equiparable a ese salario. También ha hecho hincapié en la realización de una auditoría de la deuda y de las empresas eléctricas. La reforma de la ley electoral o medidas eficaces contra la corrupción son otras de las medidas importantes.
Anguita considera que la situación actual es de una “crisis de la civilización profunda” ya que Occidente “se está cargando los DDHH”. Considera que los “proyectos con los que el pueblo fue abducido” como la Transición y la UE, “están haciendo aguas”. Ha recordado los fracasos del proceso de transición que desde su punto de vista son no haber conseguido un Estado integrado por las diferentes nacionalidades, un cambio en la forma de Estado, la laicidad, una verdadera democracia económica y social y la ética política pública.
Por su parte Garzón, recibido con gritos de “presidente”, ha destacado en su discurso la historia de lucha del PCE que debe servir para “construir el futuro”. Para él, hay que “pensar en grande” políticamente hablando porque está en juego el bienestar de las próximas generaciones. Ha recordado los efectos de las dos últimas reformas laborales y cómo han afectado a los trabajadores en términos de precariedad. Sobre la unidad popular ha vuelto a incidir en construirla en torno a un programa y con una planificación y pedadogía que vaya más allá de las elecciones. Además ha lanzado un aviso a navegantes: “Aquellos que dicen que hay que construir la unidad popular para pactar con el PSOE no son los míos”, ha señalado recordando que el objetivo es una “ruptura democrática” y no una “restauración borbónica”. También ha llamado a huir de la “espectacularización de la política”. “Hay que estar en las televisiones, pero también en los barrios y donde está la gente de verdad”. El malagueño ha incidido en un punto de su intervención en la nacionalización de las eléctricas para garantizar que nadie pase frío en invierno. Por último, ha distinguido entre objetivo e instrumento. “La tarea comunista de defender la libertad es el objetivo, los instrumentos son siempre temporales”.
Centella, que ha cerrado el acto, ha recordado que el trabajo debe continuar para construir candidaturas de unidad popular en todas las provincias. Ha hecho referencia explícita a Ahora en Común, negando que fuera iniciativa de IU pero reconociendo que se sienten cómodos en la plataforma. “Cuando volváis a oír que Alberto quiere disolver IU y yo el PCE, sabed que es mentira. Lo que queremos es reforzarnos y ser más potentes”, ha comentado.
Anguita se sale de la UE, solicita su pensión en piedras de sal para hacer trueque y fija su residencia en Katatura, donde Artur Mas no descarta ocupar una chabola contingua para tener a alguien de fuste para discutir. ¡Qué bonito!
Con razón se trata de «la fiesta» del PCE, menudo fiestón dialéctico-semántico.
DE acuerdo con Anguita. La UE es funesta, entre otras razones porque ni es Unión ni es nada. Sólo una pandilla de mangantes (comenzando por el presidente de la Comisión Europea, el corrupto Jean-Claude Juncker) que viven de puta madre, colaborando estrechamente con el gran capital a la domesticación del jubilado, el trabajador y el pueblo llano.
Qué tal amigos, buen argumento, buen contexto Es un buen trabajo