Tania Sánchez: “El PP quiso parar en la Justicia lo que no quería enfrentar en las urnas”

Esta mañana el Juzgado de primera instancia e instrucción número 6 de Arganda del Rey ha acordado el sobreseimiento de la querella presentada por el PP de Rivas Vaciamadrid contra Tania Sánchez y el actual alcalde Pedro del Cura, entre otros. La jueza encargada del caso considera en su auto que no existen indicios de delito en las actuaciones de la ex-diputada y candidata de IU en Madrid. Sánchez y su entorno más cercano siempre han sostenido que se trataba de una querella política con la intención de perjudicar su carrera política desde el momento en el que ganó las primarias de IUCM. “El PP quiso parar en la Justicia lo que no quería enfrentar en las urnas”, destaca la propia Sánchez, que reconoce su alegría por este archivo, en conversación con cuartopoder.es.

“No había nada, siempre lo he mantenido. Hoy se demuestra que así ha sido”, explica. Preguntada acerca de cómo ha vivido toda esta situación, destaca que lo que más “rabia” le ha dado ha sido que el caso le afectara a otras personas. “Con las ganas que tenía el PP de ensuciar y destruir el único patrimonio que yo tengo que es mi honestidad, porque no tengo nada más, lo que han hecho ha sido meter por medio a gente que no ha tenido la capacidad de decidir que iba a ser una imagen pública. Si eres un cargo público, estás en primera línea y asumes cierto nivel de ataque y demás, pero hay funcionarias públicas o familiares y amigos míos que no han querido estar en medio de esto y que han visto su nombre en titulares”, explica. En este sentido cree que el PP continuará con su “estrategia de desgaste” hacia ella y además recurrirán el auto. Pero les pide una cosa. “Al menos a las funcionarias que han metido en la querella y al conjunto de funcionarias del Ayuntamiento de Rivas que han acusado de ser cómplices de esto, les deberían pedir disculpas por respeto institucional”.

El auto de la jueza considera que los contratos y ayudas examinados se ajustaron a las normas administrativas, sin que se haya aportado prueba alguna de que el hermano de Sánchez accediese a su adjudicación en condiciones distintas o más ventajosas que el resto de entidades interesadas. “Es muy claro en eso. Había unos procedimientos administrativos que cumplen la ley, jamás había un sólo euro de dinero público desviado a ningún sitio distinto de lo contratado. No ha habido ningún procedimiento extraordinario ni decisiones arbitrarias o particulares, sino que ha habido procedimientos normalizados. Hace tanto tiempo de ellos que no se entiende que el PP, que ha tenido presencia en esos expedientes, no hubiese dicho nada antes. Cuando es evidente que nadie ha denunciado nada y es justo en el momento en el que opto a la Presidencia de la Comunidad de Madrid cuando se monta una trama criminal y se sustenta sobre un hecho que basta acudir a un registro público para saber que son falsos. Es evidente que era una querella política desde el principio”, explica Sánchez al respecto.

“Han intentado desprestigiarme pero el auto es muy contundente”, responde al ser preguntada sobre si la querella le afectará en su vida política futura. “De lo que se trata es de que se conozca la decisión y que no haya ninguna duda. Siempre me he sometido al escarnio público, siempre he dado explicaciones desde el minuto uno, nunca me he escondido y creo que la ciudadanía tiene sus márgenes de evaluar cómo ha sido el proceso. Pero es muy evidente lo que ha pasado”, afirma.

Para Hugo Martínez Abarca, portavoz de Convocatoria por Madrid, el resultado también era esperado. “Que se iba a archivar lo sabía todo el mundo, los que hicieron la querella, los que ayudaron a hacerla y los periodistas se aliaron con ellos”. Para él, se ha organizado “una persecución política” similares a las que han sucedido con personas como Guillermo Zapata o Iñigo Errejón. “Lo van a seguir haciendo con más gente para intentar frenar el cambio. Habrá que estar para defender a la gente inocente a la que van atacar”, advierte.

¿Candidata para las generales?

Con la cercanía de las elecciones generales, el debate sobre la unidad popular y el inicio de procesos de primarias como el de Podemos, el interrogante sobre si Sánchez participará de alguna forma en los comicios se abre hoy más si cabe. “Hasta esta mañana no tenía ninguna previsión de que el caso se archivara y por tanto el debate político no iba a incluirme a mi. La variable de que yo jugara un papel no estaba encima de la mesa. Tenía mi vida hecha y pensada asumiendo que no iba a estar en procesos electorales. Por tanto no me ha dado tiempo. No han pasado ni 8 horas y me estoy dedicando a extender la noticia, que se conozca y que todo el mundo sepa la verdad”, responde.

En cualquier caso alude a la necesidad de que la decisión será colectiva. Su plataforma se debe reunir para abordar la posición ante las primarias de Podemos y las próximas elecciones generales. “Tendremos el debate político que tengamos que tener y luego tomaremos las decisiones que haya que tomar colectivamente y a quien le afecten individualmente”, señala.

Sánchez pasó en unos meses de ganar con contundencia el proceso interno de primarias en IU a desparecer de la “carrera política” de primera línea. En febrero, por las diferencias con la dirección de IUCM decidió junto a otros compañeros dejar la organización. Puso en marcha junto a otros actores políticos como Equo o Por un Mundo Más Justo la plataforma Convocatoria por Madrid. Tras una semana de negociaciones intensa algunos integrantes de esta iniciativa se integraron en las listas de Podemos para la Comunidad de Madrid aunque ella no participó. Su trabajo se ha dedicado desde entonces a la construcción de candidaturas de unidad popular en la región. Paralelamente, una querella del PP la llevó a declarar a los juzgados el pasado 23 de junio. El PP le atribuía unos supuestos delitos de prevaricación, tráfico de influencias y malversación de caudales públicos en la adjudicación de contratos municipales a la cooperativa Aúpa, de la que era socio y administrador único Raúl Sánchez, su hermano. Los hechos ocurrieron en 2008.