Miles de personas convocadas por distintas asociaciones provida han exigido al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que cumpla su promesa electoral y "erradique" el aborto de la legislación española y le han advertido de que, si no lo hace, la sociedad le exigirá responsabilidades. Bajo el lema "Cada vida importa", la manifestación ha partido de la madrileña glorieta de Ruiz Giménez hasta la plaza de Colón en un ambiente festivo que sólo ha sido interrumpido cuando la cabecera ha llegado a la sede del PP, en la calle Génova, donde se han podido escuchar pitos y abucheos. Entre los asistentes, además de una veintena de diputados del PP, se encontraba la alcaldesa de Madrid, Ana Botella, que ha declarado que participado "por defender el derecho a la vida y por coherencia".
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