El PSOE cree que hay otros beneficiarios del PP en las cuentas suizas de Bárcenas

A los socialistas les ha indignado que, por segunda vez, un auto judicial dé por acreditada la Caja B del PP (la primera fue el de 22 de noviembre de 2013) y ninguno de sus dirigentes diga nada ni asuma responsabilidades. Sus dirigentes destacan que el nuevo auto del juez Pablo Ruz, emitido la semana pasada, demuestra que el partido que está gobernando España lleva años financiándose con dinero negro, procedente de cohechos “y ni pasa nada ni el PP ni el Gobierno al que sostiene se ven en la obligación de dar ninguna explicación ni, mucho menos, de asumir ninguna responsabilidad”.

De hecho, señalan, los “populares” se han limitado a sacar al portavoz adjunto del PP en el Parlamento, Rafael Hernando, quien se despachó con un displicente: "En el PP no ha habido caja B y si la ha habido será de Bárcenas”, lo que les parece “de broma”.
De ahí que en Ferraz hayan decidido adoptar medidas políticas para que el caso Bárcenas-Gürtel no pase a un segundo plano durante la campaña de las elecciones europeas como, a su juicio, pretenden el Gobierno y el PP.

De hecho, la propia número uno de la lista europea, Elena Valenciano, comentó el día siguiente a la publicación del auto: ““Estamos hablando de financiación ilegal del PP durante mucho tiempo. Lo ha dicho un juez y eso tiene muchísimo valor. Ahora le toca al PP responder por ello”. En un documento interno remitido a sus cuadros para que se hagan eco público de lo sucedido más allá de lo expresado por los medios de comunicación, el PSOE recuerda los hechos: “El juez que instruye las causas del caso Bárcenas y Gürtel emitió el día 2 de abril de 2014 un Auto en el que puede leerse que el acusado habría distraído fondos de la contabilidad paralela o 'B' del Partido Popular controlada por el imputado señor Bárcenas Gutiérrez en su condición de gerente y después tesorero de la referida formación política”.

Para los socialistas, más allá de los delitos de Bárcenas, los hechos más graves que se derivan son dos. Primero, que el informe fiscal, la policía y el propio juez reflejan la existencia real de una contabilidad B en el PP -es decir, en dinero negro- durante muchos años, lo que implica fraude, delito fiscal, delito contable y financiación irregular de partido político. Y segundo, que esa Caja B con la que el PP lleva años financiándose irregularmente se nutría del dinero que le daban determinadas empresas a cambio de adjudicaciones públicas, lo que implica un delito de cohecho.

Para avalar esas aseveraciones, los socialistas refieren varios párrafos textuales del auto: “De acuerdo con lo hasta ahora actuado, tal y como se ha reiterado en distintos informes, los referidos fondos procederían, al menos en parte, del cobro de distintas comisiones vinculadas a adjudicaciones públicas y se habrían ocultado a la Hacienda Pública no reflejándose en las correspondientes declaraciones tributarias”. “Prevaliéndose de su condición de gerente de la formación política y de la opacidad de la referida contabilidad paralela…se nutriría, básicamente, de donativos efectuados por personas relacionadas con entidades beneficiarias de importantes adjudicaciones públicas”.

Para el PSOE, “la gravedad de los hechos que se consideran judicialmente probados exige una rendición de cuentas urgente de Rajoy y del PP ante los ciudadanos, así como la asunción de responsabilidades políticas. Nadie entendería en el resto de Europa que la sociedad española asumiera como normal y en el mayor de los silencios una situación como esta en el partido que gobierna el país”.

También indican que “estamos ante la triste paradoja de tener la confirmación de que el PP lleva años y años defraudando a Hacienda en los mismos días en que el Gobierno que sostiene abre el plazo para que los ciudadanos cumplamos con nuestras obligaciones fiscales, haciendo la Declaración de la Renta”.

Basándose en el auto, los socialistas también insinúan que Bárcenas no ha sido el único beneficiario del PP de las cuentas de Suiza. “¿Hay quien pueda creerse que Bárcenas se llevó 50 millones de dinero negro del PP a Suiza (como ya está judicialmente acreditado), sin que nadie en el PP se diera cuenta? ¿Hay quien pueda creerse que Bárcenas se llevara esos 50 millones sin el beneplácito de los más altos dirigentes del PP? Pero sobre todo, ¿hay quien pueda creerse que los 50 millones de euros que Bárcenas se llevó a Suiza eran solo para él?”, se preguntan. Y concluyen: “Ya es hora de que se pongan nombres y apellidos a los verdaderos beneficiarios – además de Bárcenas- de las cuentas con dinero negro del PP en Suiza”.