Rosa Díez exige al ministro Soria que explique los enchufes del PP en Paradores

Siempre atenta a las rebajas y oportunidades políticas, tan frecuentes entre los ministros ineptos y prepotentes, la dirigente de UPyD, Rosa Díez, ha aprovechado el conflicto laboral en Paradores de Turismo para denunciar la red de enchufes que alberga. Resulta cuando menos sorprendente que en los dos últimos años de extraordinario crecimiento del turismo y del gasto de nuestros visitantes, la cadena hotelera de edificios singulares más bellos y confortables del mundo, haya registrado pérdidas.

El ministro de Industria, Turismo y Comercio, José Manuel Soria, ya dijo que “en Paradores no se ha producido un debido control de gastos” y  que claramente puede verse a la luz de los costes de las reformas de algunos de sus establecimientos. Su objetivo, como en otras entidades públicas que pudiendo ser rentables social y económicamente arrojan pérdidas, es aligerar la plantilla y privatizar los hoteles a favor de los postores amigos y convenientes.

En Paradores, según este Soria, sobraba el 14% de la plantilla, exactamente 644 trabajadores. Su expulsión y el cierre temporal de algunos establecimientos resultaban imprescindibles para evitar que las pérdidas alcanzasen 140 millones de euros en 2013. Después de la huelga y los encierros de obreros y operarios en defensa de sus puestos de trabajo ha quedado demostrada la viabilidad y rentabilidad de la cadena, se salvarán más de 400 empleos que iban a ser liquidados y se mantendrán todos (menos uno) los establecimientos abiertos durante todo el año.

Pero el estilo de mando, la prepotencia ejecutora de los ejecutivos, ha provocado un daño evidente; sólo en el puente de la Constitución y la Inmaculada Concepción, la recaudación se redujo en un 50% respecto al mismo periodo de asueto del año anterior. ¿Por qué ocurre esto? ¿Qué clase de ejecutivos son esos que fuerzan la situación para perjudicar a la sociedad estatal? Y es aquí donde encontramos la denuncia parlamentaria de la diputada de UPyD sobre la cantidad de “altos cargos próximos al Partido Popular” imbricados en Paradores y que “algo puede haber influido en la situación actual”, sostiene Díez.

La diputada menciona a Ángeles Alarcó, exmujer de Rodrigo Rato como presidenta de Paradores de Turismo; Águeda Areilza Carvajal,  nieta del fundador del partido Jose María de Areilza y ahora jefa del gabinete de la presidenta de Paradores; Juan José Zaballa, amigo del ministro Cristobal Montoro y director general de Paradores y expresidente de la sociedad estatal Cofides para el fomento de inversiones en el exterior de empresas españolas durante el primer gobierno de José María Aznar.

También cita a Rafael Lemes, que fue consejero de Juventud y Nuevas Tecnologías del Cabildo de Gran Canaria del gobierno del ahora ministro y máximo responsable de Paradores, Soria, en dicho Cabildo; Teresa Cervera, hermana del expresidente del PP de Navarra, exsecretario de la Mesa del Congreso y exdiputado, Santiago Cervera, que fue obligado a dejar su escaño en diciembre pasado tras el extraño suceso de la recogida de un sobre que, al parecer, contenía dinero; María José Sepúlveda, que dirigía el parador de Toledo y siendo amiga personal de María Dolores de Cospedal ascendió a directora operativa y comercial de la sociedad estatal.

Después de la amplia nómina de enchufes, en la que incluye al director de comunicación de Paradores, el periodista Ramón Ongil, hermano de la vicesecrearia del PP de Madrid y senadora Sandra Ongil, la dirigente de UPyD exige que el Gobierno le explique por escrito qué “criterios de profesionalidad” ha utilizado para nombrar altos cargos en Paradores, qué experiencia tenían en el sector, si también están afectados por el Expediente de Regulación de Empleo y si la contratación como altos cargos de “personas con una estrecha relación de amistad y parentesco” con dirigentes de un partido político es una imagen positiva para la clase política.