En la dirección nacional del PP creyeron inicialmente que la historia se repetía y que la alcaldesa, Ana Botella, y el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, iban a andar a la gresca, igual que sus antecesores, Alberto Ruiz-Gallardón y Esperanza Aguirre, o el propio Gallardón y José María Álvarez del Manzano. Sin embargo, el enfrentamiento público que ambos protagonizaron recientemente a cuenta de la actuación del Ayuntamiento en la tragedia del Madrid Arena y el posterior posicionamiento público de la alcaldesa contra el cierre del Hospital de la Princesa, desataron las alarmas en la dirección nacional del partido.
La encargada de tratar de sofocar la reyerta fue la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, quien, el pasado 12 de noviembre, tuvo que llamar a Botella y, posteriormente a González, para poner paz o, mejor dicho, para exigir que, públicamente, guardasen las formas. Por la mañana, habló con Botella, quien le trasladó sus quejas por el trato que le estaba dispensando el presidente madrileño y, ya por la tarde, con el propio Ignacio González.
La intervención de la secretaria general popular logró imponer el fin de las agresiones en público, aunque las hostilidades no hayan cesado de forma soterrada. Desde el entorno de González señalan que el presidente madrileño simplemente no podía defender la gestión de la alcaldesa y su equipo, mientras que el entorno de Botella se queja amargamente de lo que entiende que fueron “ataques gratuitos e innecesarios” de González. Además, aseguran que González actuó “de mala fe” cuando atribuyó al desconocimiento el hecho de que Botella firmase contra el cierre del hospital de la Princesa. En este punto, explican que Botella era muy consciente de lo que firmaba y, como bien sabe González, tiene cinco médicos en la familia que acostumbran a darle información y opiniones de primera mano. Además, subrayan que sería una “absoluta incoherencia” que la alcaldesa de Madrid apoyase el cierre de uno de los hospitales de referencia de la ciudad y de la Comunidad de Madrid. “De hecho- añaden desde el entorno de Botella- tiene una opinión muy formada de la reforma sanitaria y se la calla por prudencia”.
En la planta noble de la sede del PP no quieren más líos ni broncas. Son conscientes, tal como admiten los más próximos a Mariano Rajoy, de que tienen un problema en Madrid, y que, en palabras de un dirigente nacional “ni el presidente de Madrid ni la alcaldesa son líderes consolidados ante el electorado. Eso nos preocupa y a ellos debiera ocuparles algo más de lo que les ocupa esta guerra”. En la cúpula del PP dudan seriamente de que Botella o González puedan llegar a presentarse en 2015 como cabezas de lista. “No se puede descartar absolutamente que lo vayan a ser, pero desde luego, no hay nada decidido aún”, señala una destacada dirigente popular. Lo único que parecen dar por sentado en la dirección nacional del PP es que el tirón popular que tienen ambos en el electorado es “discreto tirando a escaso”. Pero, agobiados por la situación económica y el día a día, no están dispuestos “a abrir ahora ese melón”, afirma otro dirigente del partido. No lo abren ahora y, probablemente, tampoco en el próximo año y medio, aunque la intención de esa dirección es explorar otros nombres alternativos tanto a González como a Ana Botella. Pero, cada día tiene su afán y el de hoy no es, desde luego, ni buscarles relevo, ni permitir que sigan lanzándose dardos y reproches mutuos.
Por ahora, la guerra sigue abierta y, en el entorno de Rajoy opinan que Botella es trabajadora y honesta, pero que, en una confrontación directa con la Comunidad de Madrid, o con Ignacio González, tiene todas las de perder. Por eso, cuando Cospedal, el pasado 12 de noviembre llamó al orden a alcaldesa y presidente, se empleó con mayor contundencia con González, tratando de frenar en seco cualquier iniciativa que pase por descabalgar de su puesto a Ana Botella. De González… todo se andará.
Espero por el bien de todos que se pongan de acuerdos y usen más diplomacia.
Veo la santa indignación de algunos jueces, muchos de ellos miembros de sus asociaciones, por el indulto del Gobierno Rajoy para con cuatro “mossos”.
Créanme que celebro la honradez y honestidad intelectual/profesional que demuestran, pero permítanme un par de observaciones:
1)No ví, por ningún lado, su protesta por el indecente indulto del delincuente A. Sáez, Consejero Delegado del Banco de Santander
2)En sus colectivos, los de Vdes., se hacen cosas bastante más indecentes. Por un corporativismo trasnochado, caduco y despreciable, se (auto)absuelve a sus propios colegas hasta el punto de pasar por alto una actividad delictiva: hacer de COOPERADORES NECESARIOS de los delincuentes. Esto es bastante más impresentable que lo hecho por el Gobierno, que también lo es.
No me cabe dudad de que ese colectivo hará un ejercicio adicional para mejorar la justicia denunciando el atropello que se comete con un ciudadano de a pie.
Una copia de este escrito va a ser publicado en todos los digitales que me lo permitan.
Un cordial saludo.
E…..
http://prostivaricacion.blogspot.com
Se me olvidaba decir que el anterior mensaje es copia del dirigido a algunas asociaciones de jueces