Dos caras de la misma moneda. Si los últimos datos de empleo, publicados esta semana, evidenciaban una notable subida en el número de contratos indefinidos, el reverso muestra la peor cara de la contratación inestable. En el último mes, se firmaron 174.287 contratos indefinidos. También se firmaron 394.314 contratos con duración menor a una semana, los más inestables de toda la tipología de acuerdo laboral.
Este no sería un dato a destacar si no fuera por el enorme aumento del peso de este último tipo de contratación, el de duración menor a una semana, en los últimos años. Son estos contratos más precarios e inestables los que permiten que, por el otro lado, florezca y destaque la contratación indefinida.
En marzo de 2008, el número de contratos indefinidos fue de 168.133 y de duración menor a 7 días 214.944, una diferencia de un 27%. Un panorama totalmente diferente al actal de la serie histórica, en 2008. En febrero, último mes del que se poseen datos, se firmaron 174.287 contratos indefinidos frente a 394.314 con duración menor a una semana. Una diferencia entre ambos tipos del 126%, más del doble en un mes en el que la influencia de la contratación enfocada a la cobertura del periodo vacacional de Semana Santa aún no es tan notable.
La tipología de contratos de duración menor a 7 días se disparó con la llegada de la crisis económica. Mientras a inicios del periodo, en 2008, la contratación más inestable suponía un 15% del total de contratos firmados, en la actualidad suponen el 25%. Esto convierte en incierto el futuro de gran parte de los trabajadores que salen de la situación del desempleo mes a mes.
Contratos temporales más cortos
La contratación temporal es, además, cada vez más corta y prueba de ello es que actualmente la duración media de los contratos temporales es de 55 días. Al inicio de la serie histórica, en 2008, la duración de los contratos temporales se situaba en 84 días. En diez años la duración media de los contratos temporales ha descendido un 35%.
Para los sindicatos, estos datos revelan que aún el empleo precario se encuentra “enquistado” en el sistema laboral español. “El empleo que se crea sigue siendo precario; solo el 11,7% de los contratos registrados son indefinidos y únicamente el 6,9% del total son indefinidos a tiempo completo”, ha afirmado Mari Carmen Barrera, de UGT.
Además, desde organismos sindicales, destacan la letra pequeña en la euforia del Gobierno con los últimos datos de contratación indefinida. "El empleo que se crea es temporal, estacional y precario. Sólo el 11,7% de los contratos son indefinidos y únicamente el 6,9% del total son indefinidos a tiempo completo", destacan. Para acabar con estos datos de precariedad, instan a "reponer los derechos de los trabajadores y derogar en su totalidad las reformas laborales".