Desde que el 10 de abril de 1994 Cándido Méndez se hiciera con las riendas de UGT, y a solo 24 horas del arranque del 42 Congreso Confederal, parece que algunas cosas están más abiertas que nunca y que 'otras' siguen tan estancadas como siempre en el sindicato. Entre las primeras, y no es moco de pavo, quién será el nombre del hombre –no habrá candidata, esto se puede poner entre las 'otras'– que sustituirá a Méndez al frente de la organización después de 21 años y 10 meses de Candidatazo. Esta vez habrá dos aspirantes para liderar el sindicato, habida cuenta de que el tercero en discordia, el secretario general de Canarias, Gustavo Santana (San Bartolomé de Tirajana, Gran Canaria, 1956) no conseguirá finalmente, según todos los pronósticos, el aval del 25% de los 601 delegados que concurrirán a partir del miércoles a la cita asamblearia de la central socialista.
Y eso a pesar de que algunas de las enmiendas más 'radicales' sobre la renovación interna, de entre las 2.500 que se van a debatir estos días, han sido presentadas, precisamente, por la organización que lidera el canario. Entre esas enmiendas destaca la que propone reducir al 10% el número de avales necesarios para presentar candidaturas –por la cosa de fomentar la pluralidad, digo yo– y, fundamentalmente, la que apuesta por las primarias en el proceso de elección del secretario general de la confederación, de las federaciones y de los territorios. Esto es, fomentar la participación de las afiliadas y de los afiliados en la elección de sus representantes, que es por donde parece que van los tiros estas alturas del siglo XXI.
Este 'manojito de enmiendas revolucionarias' de los canarios lo conocemos no porque esté colgado en la página web del sindicato –que no lo está porque, me dicen, es "estatutariamente imposible"–, sino porque el 'presunto descartado Santana' las ha puesto en circulación en sus comparecencias ante los medios. Pero parece que ni aun así, ni con eco mediático y todo –poco, eso sí– gozarán del apego del respetable. Y un dato más: las normas que apruebe el 42 Congreso se tendrán que aplicar en el siguiente. Esto es, que si los delegados de UGT rechazan ahora la enmienda de los canarios estarán aplazando las primarias en la elección de los principales cargos de la organización hasta 2024... Largo me lo fiáis...
Sobre la autocrítica de la dirección respecto a asuntos tan lacerantes como el de los ERE en Andalucía, el de José Ángel Fernández Villa (SOMA-UGT) o el de los implicados en el caso de las tarjetas black de Cajamadrid tampoco sabemos oficialmente nada, aunque todo apunta a que el asunto quedará cerrado con una propuesta para aumentar los controles de buenas prácticas gracias a la creación de una comisión ética de la que van a formar parte tres personas ajenas al sindicato que, se supone, nombrará el sindicato. Una auténtica revolución.
Así las cosas, y volviendo a la cruda realidad, parece que las lentejas se las van a jugar el secretario general de UGT en Cataluña, Josep María Álvarez (Belmonte de Miranda, Asturias, 1956) y el de la federación de Movilidad y Consumo, Miguel Ángel Cilleros (Salamanca, 1962). La batalla está servida y fuentes de la dirección confirman que sigue abierta y que, posiblemente, se cerrará en el último minuto y tras una "apretada votación".
Sea cual sea el elegido, lo que está claro es que el sucesor de Méndez tendrá que apechugar con una nueva estructura, basada en tres grandes macrofederaciones (Servicios Públicos, Servicios Privados y Sectores Industriales y Construcción), en las que el "papel" de cada uno de los sectores tradicionales se desconoce a día de hoy –cuando hablamos de "papel" hablamos de porcentajes de representación y, fundamentalmente, de financiación–, y que pueden acabar convirtiéndose en tres superestructuras que más que colaborar para racionalizar los recursos comunes se líen a mamporros a la hora de adjudicarse unos ingresos cada vez más escasos y que no dan para pagar todas las nóminas de los buenos tiempos ni algunas de las cosas que se hacían entonces.
El mensaje de la candidatura de Cilleros es precisamente que su intención es repartir ese nuevo poder estructural entre los distintos sectores. El del candidato de la federación catalana, su apuesta por el derecho a decidir de los ciudadanos de Cataluña y sus efectos colaterales en lo que respecta a la primacía de los convenios autonómicos respecto a los estatales o su apuesta por un marco propio de relaciones laborales en Cataluña.
Los movimientos de los dos candidatos se siguen produciendo y parce que así va a pasar hasta el último minuto. La solución al embrollo, que no tiene pinta de ser una solución de largo recorrido, se mire por el ojo del candidato que se mire, quedará cerrada en el plazo de 72 horas. Parecen pocas para tanto jaleo. Seguiremos informando...
Todos los Congresos de cambio de líder son complicados, lo importante son las resoluciones que den respuesta a los numerosos problemas de los trabajadores y trabajadoras y el avance en la implantación en las empresas y entre los que se encuentran en el paro, no en quienes son los candidatos o CANDIDATAS a la secretaría general, por el bien de los castigados trabajadores hay que desear lo mejor y que los cambios tan necesarios den las respuestas mejores. El descrédito actual no debe oscurecer la auténtica realidad de que los sindicatos de clase son más necesarios que nunca. Como dices que seguirás informando espero que lo hagas con acierto, pues tu sabes hacerlo.
No hay demasiada información sobre la actividad sindical (más bien todo lo contrario). Supongo que se lo debemos a los actuales jefes de los sindicatos, que parece que estén de vacaciones desde hace unos 8 años.
O los sindicatos cambian y se democratizan en profundidad o les queda un suspiro de vida. Lástima.
Soy uno de los mucho delegados de la UGT de Catalunya que va a cambiar de sindicato. La gestión de ‘Pepe’ Álvarez, sectaria y nefasta. Por el bien de la UGT a nivel estatal, espero que su candidatura no llegue a buen puerto. ¡Salud!