Lo de la banca de negocios anglosajona no es sinvergonzonería, es que es puro cachondeo. No es que nuestros bancos y cajas de ahorros sean un ejemplo, pero sí tienen algo más de decoro. O tal vez es una obsesión personal, pero comprobar que en las últimas jornadas se han hundido nuestros mercados ante el aluvión de informes demoledores sobre EE3UU de Morgan Stanley y compañía es algo que debería provocar la ira más furibunda, sobre todo cuando resulta que estas entidades han sido las causantes de la crisis y las mayores receptoras de ayudas públicas.
Se puede encontrar cierto consuelo espiritual cuando publicaciones del enorme prestigio de Bloomberg insisten una y otra vez en el mismo asunto, aunque sin éxito, vista la ausencia de reformas. Se ve que los lobbies y políticos que les amparan son más sólidos que cualquier otra institución democrática que vele por el bien común, aunque el mismísimo Obama esté al frente.
En un nuevo artículo que no tiene desperdicio, se puede comprobar cómo Morgan Stanley precisó más de 100.000 millones de dólares de la Reserva Federal (se dice pronto), a pesar de que la entidad no hacía más que criticar al Tesoro por unas necesidades de liquidez 10 veces inferiores.
El agujero llegó por la unidad de hedge funds, que vio cómo se le fue dinero a marchas forzadas. Esta división adelanta la liquidez de estos fondos de alta sofisticación, que toman posiciones al alza, a la baja o al descubierto. Sin embargo, Morgan no tenía previsto cómo actuar en caso de huida masiva de capitales, tal como ocurrió, a pesar de haber adelantado tanto dinero de sus clientes. Un auténtico desastre.
Tal como se lee en el artículo de Bloomberg, estos bancos de alto standing dependen en gran medida de sus áreas de fondos buitres. Como ha ocurrido siempre, exprimen la vaca a la hora de engordar cuentas de resultados pero no tienen cubiertos los más elementales movimientos de prudencia. ¿Para qué? Cuando vengan mal dadas, ya pondrá el dinero otro.
Este gráfico es elocuente: las compañías que más liquidez han precisado de la Fed son Morgan, Citi, Bank of America, RBS... y en posiciones punteras están, evidentemente, Merrill, Goldman, JP, UBS, Deutsche, Lehman Brothers, e incluso no hay que bajar demasiado para ver al Santander o a BBVA.
Lo bueno es que en recientes días, los informes de Morgan, y también los de JP y Citi, han hundido los mercados, ante sus agoreras previsiones. Todo un ejercicio de cinismo, que viene a decir “mientras estemos nosotros, esto irá mal para todos, aunque bien para nosotros”. Lo peor es comprobar cómo los políticos de primera fila se pliegan ante ellos, aceptando estos hechos como algo que hay que asumir. Las palabras de Salgado así lo demuestran.
¿De verdad no es capaz una ministra y vicepresidenta de España; miembra del Ecofin, de pronunciar unas palabras de descalificación sobre unos informes cuya autoridad moral está totalmente deslegitimada? ¿No es capaz de recordar que esas entidades publican hoy porque fueron rescatadas ayer con dinero de todos?
El verano sufrido será muy negativo para España. Después de una convocatoria de elecciones que debería haber aportado cierto sosiego, el castigo a nuestra renta variable y nuestros bonos ha sido demoledor. Conviene recordar de nuevo que la caída de la Bolsa afecta a todo el mundo, de manera directa e indirecta. Lo mismo vale para la deuda que castiga a las empresas, a los emprendedores, al sistema financiero y, por supuesto, a los ahorradores.
Que ahora salgan estas firmas poniendo en entredicho el desarrollo de una economía que les permitió vivir es macabro. Estas entidades son como el escorpión, que pinchan porque tienen que hacerlo, aunque sea al elefante que les está cruzando hasta la otra orilla del río.
Conviene recordar de nuevo que una de las medidas a afrontar en esta crisis es la separación de las áreas de actividad de la banca de negocios, así como la reducción de sus respectivos tamaños. En su día, estas entidades, antes de salir a cotizar, eran propiedad de sus dueños históricos, que las gestionaban con una prudencia extrema.
Ahora, no se sonrojan lo más mínimo ante los incontables casos de corrupción que les ha salpicado. No consideran una deshonra sus rescates públicos, ya que son demasiado grandes para caer, pero no dudan en lanzar andanadas de posiciones cortas, hundiendo cotizaciones de bolsa y deuda, amparándose en sus propios informes, siempre al servicio de sus inversiones.
Que siga ocurriendo esto a estas alturas no es una ineficiencia del mercado, es puro cachondeo hacia las altas instancias que les dieron de comer y, por supuesto, hacia el ciudadano.
Ya, Manel, ¿y qué solución propones? ¿Qué medidas concretas y realistas? Sería bueno que nos informaras en un post de las medidas posibles.
Saludos
Por favor pedir a amigos,conocidos,familiares que no voten ni al psoe ni al pp pasarlo por favor.Si nadie vota a estos dos partidos los que ganen tendran que cambiar las cosas sin posibilidad de no hacer nada.Estarian obligados a cambiar la justicia y la leyes electorales la clave es que psoe y pp no tengan ni un voto.GENERACION NI NI,NI PSOE NI PP PASARLO PORFAVOR,hablar de ello con familiares y amigos y que nadie les vote y TODOS A VOTAR.Que voten a quien sea menos psoe y pp gracias.
Está visto que el Capitalismo sólo puede funcionar gracias al Estado, pero hay por ahí neoliberales (PPSOE incluido) que todavía no se han enterado. Ni se quieren enterar.
Son unos parásitos. Dejo una explicación del negocio de la banca de inversión que me ha dejado perplejo:
http://www.anguloinversor.com/2011/09/opa-yo-voy-hacer-un-investment-bank.html