Vox intenta juzgar por delito de odio a 13 activistas de Vallecas
En la mañana de hoy estaba prevista la celebración del juicio contra 13 activistas del barrio de Vallecas a los que Vox acusaba de un posible delito de coacciones con el agravante de discriminación ideológica. El juicio ha sido suspendido. "Tras haber desestimado inicialmente la Fiscalía el delito de odio, dejando solo el agravante, Vox vuelve a solicitarlo, y por un "error del juzgado" ahora volverán a planteárselo", ha informado la plataforma de apoyo en sus redes sociales.
"Esto significa que, a pesar de que inicialmente la Fiscalía rechazó que existiese el delito de odio metiéndonoslo como agravante, podrá volver a pronunciarse sobre ello. Entendemos que no han cambiado los motivos para que cambiasen su parecer. Pero todo puede pasar", añaden.
Un posible delito de odio también implicaría una mayor pena aunque todavía se desconoce lo que se les pedirá. "A pesar de ello, no vamos a claudicar. En democracia, llamar fascistas a los fascistas no puede ser delito. No van a ser capaces de borrarnos nuestras sonrisas con su represión, no nos aislarán. Seremos más y más fuertes", han destacado desde el colectivo de apoyo.
"Nos citarán de nuevo o bien para declarar como investigados o para que tengamos el juicio por fin", ha afirmado el abogado de las personas encausadas, Erlantz Ibarrondo. "La lucha es el único camino, no estamos solos"; ha afirmado uno de los activistas a las personas que han acudido a los juzgados de Plaza de Castilla para apoyar la causa.
Los hechos ocurrieron durante la pasada campaña electoral cuando un grupo de personas, “escoltadas, extrañas al barrio de Vallecas y pertenecientes a Vox”, según la plataforma de apoyo, acudieron con pancartas. Ante esto, un grupo de personas decidió protestar con cacerolas, silbatos y otras pancartas. Varios de ellos fueron ya identificados por la policía ese día.
