Activistas protestan en la embajada de Arabia Saudí contra una Supercopa no igualitaria

Un grupo de mujeres de Amnistía Internacional ha realizado hoy un acto de protesta frente a la Embajada de Arabia Saudí en Madrid para pedir la libertad de Loujain al-Hatloul, activista saudí en prisión desde mayo de 2018 por reclamar el fin del sistema de tutela masculina que restringe derechos de las mujeres. Este acto se ha realizado en el contexto de la celebración de la SuperCopa de Fútbol de España en la ciudad de Yeda, Arabia Saudí, que se inicia hoy. Las mujeres de la organización han posado como si fueran un equipo de fútbol con el dorsal 600, que son los días que lleva en prisión Loujain.

Loujain al-Hathoul es una de las 11 activistas que actualmente están en riesgo de ser condenadas a penas de hasta 20 años de prisión por defender los derechos de las mujeres en Arabia Saudí. Amnistía Internacional recoge firmas para conseguir que queden en libertad sin cargos en su centro de activismo online.

"Durante décadas, en Arabia Saudí las mujeres han sido sometidas a leyes represivas que han impuesto restricciones a sus derechos de viajar independientemente, trabajar o estudiar, lo que limita varios aspectos de sus vidas. Ante esta situación, multitud de activistas han alzado su voz", señalan desde la organización. Una de ellas es Loujain al-Hathloul que, aunque estudiaba en Canadá, regresó a Arabia Saudí en 2013 para participar en una campaña de protesta por la prohibición de las mujeres para conducir. Su padre la recogió en el aeropuerto, le entregó las llaves de su coche y la filmó conduciendo a casa. Publicó el vídeo y al instante se convirtió en la imagen de la campaña #Women2Drive. En septiembre de 2017, el Rey saudí emitió un decreto que permitiría a las mujeres conducir legalmente a partir de junio de 2018. Este decreto es un ejemplo de la victoria del activismo de Loujain y otras defensoras de los derechos de las mujeres que llevan luchando por sus derechos durante décadas.

Sin embargo, Loujain apuntó más alto. En varios blogs, informó a las mujeres sobre sus derechos y les animó a defenderlos. En concreto, pedía acabar con el sistema de tutela masculina, un impedimento importante para hacer realidad los derechos de las mujeres en el país. Fue arrestada en mayo de 2018, acusada de querer desestabilizar a Arabia Saudí y sigue detenida. Durante los interrogatorios, fue víctima de abuso sexual, tortura y otras formas de malos tratos.

Según explica AI, su detención y la de otras mujeres activistas que también fueron sometidas a abusos y malos tratos ( Aziza al-Yousef, Iman al-Nafjan, Ruqayyah al-Muharib, Amal al-Harbi, Hatoon al-Fassi, Abir al-Namankani Maysaa al-Mane’a, Maya’a al-Zahrani, Nouf Abdulaziz, Shadan al-Anezi) forman parte de una oleada represión de la disidencia en Arabia Saudí, donde reclamar pacíficamente los derechos de las mujeres y expresar opiniones libremente entraña riesgos que incluso pueden acabar en condenas de 20 años. Amnistía Internacional pide que todas ellas sean puestas en libertad de forma inmediata y sus cargos retirados.

En agosto de 2019, el Ministerio de Medios anunció algunas reformas legislativas; reformas que, por ejemplo, permiten la igualdad de derechos para hombres y mujeres mayores de 21 años para solicitar y obtener un pasaporte, la igualdad de derechos para mujeres y hombres mayores de 18 años para registrar el nacimiento de un pariente recién nacido, registrar la muerte, el matrimonio o el divorcio, el derecho de solicitar y obtener un registro familiar y que tanto hombres como mujeres actúen como jefes de familia.

"Sin embargo, todavía no está claro cuáles son las regulaciones de implementación de este decreto y siguen vigentes muchas otras restricciones de derechos", destaca la organización.