‘Los odiosos ocho’: retírese ya, señor Tarantino

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Cartel de la nueva película de Tarantino, 'Los Odiosos Ocho'. / eOne Films

Atención, porque ya en los créditos de esta película nos advierten. Estamos ante una obra magna: “La octava película de Quentin Tarantino”. Oh, perdóneme usted la vida, genio del celuloide. En estos tiempos de directores egomaníacos (pienso en Tarantino y también en Iñárritu) que estrenan películas de metrajes de tres horas, tan dañinos para la vejiga, pienso en los viejos productores de Hollywood, que no hubiesen permitido, bajo ningún concepto, semejantes delirios en el proceso de guión y en el de montaje.      

A diferencia de aquellos jefazos de estudio, los padrinos de Tarantino (los hermanos Weinstein, con su compañía financieramente muy tocada) le dejan hacer y deshacer a sus anchas. Sabedores de las taquillas del director, aceptan sus guiones sin rechistar, aunque el buen hombre roce el ridículo, como con ese grotesco final de Malditos bastardos, en la que un comando de tebeo mata a Hitler y a toda la primera plana nazi (si no la ha visto usted es que ha salido del coma). De pequeño, cuando jugaba con soldaditos de plástico, me curraba más las historias que Quentin.     

Pero claro, cualquiera le dice nada a este individuo hiperactivo, que aquí estamos hablando de genios del cine, de artistas insobornables y libérrimos que ruedan, escriben y montan lo que desean a pesar del público, de la lógica y de una narración pulida y sin delirios autorales.

Pero, ay, la marca Tarantino hace mucha caja; llena las salas de cine en todo el mundo gracias a millones de modernos que aguantan sin ir al baño y ríen supuestas gracias que no veo por ningún lado, porque este señor manejaba el humor en sus diálogos, pero hace mucho que perdió esa particularidad. Ahí están esos eternos y poco inspirados diálogos de Malditos bastardos o Django desencadenado para demostrar su completa decadencia en este terreno y el daño que hacen estos paliques al ritmo de sus películas.

Los odiosos 8 está ambientada pocos años después de la Guerra de Secesión. Empieza con una diligencia en un paraje nevado. En ella viajan Kurt Russell, que hace de cazarrecompensas, y Jennifer Jason Leigh, su fugitiva. En el camino se encuentran con Samuel L. Jackson, militar, y un sureño renegado. Los cuatro acaban en una parada para diligencias donde encuentran a Demian Bichir, que hace de chicano, a Tim Roth, que hace de verdugo, a Michael Madsen, que hace de vaquero, y a Bruce Dern, general confederado y todo el rato sentado.  

A diferencia de aquella obra maestra de John Ford (y que tantas veces se proyectó Orson Welles para aprender lo que era eso de dirigir cine), a la diligencia de Los odiosos ocho le cuesta mucho llegar a su improvisado destino porque sus pasajeros hablan mucho. Lo suyo es un palique verdaderamente cansino desde que empieza la película hasta que acaba. Ya desde los minutos iniciales empiezas a intuir la tabarra que te van a dar durante casi tres horas de película. Un suplicio.

Cuando la diligencia llega a la cabaña donde se desarrolla la acción, todos tus temores se empiezan a hacer realidad: la película se va a desarrollar entre esas cuatro paredes. La razón es sencilla: Tarantino quiere regresar a sus orígenes (aquel icónico garaje de Reservoir Dogs) y pretende una fusión entre La cosa, de Carpenter, y obras de Agatha Christie como La Ratonera o Diez negritos.  

Los odiosos ocho recuerda demasiado a la magistral obra de Carpenter: hombres aislados, mucha nieve, mucho frío, Kurt Russell, música de Ennio Morricone (nominado al Oscar), alguien que finge ser quién no es y amenaza a todo el grupo, sorpresas, sangre, vísceras... Pero, ay, sin el talento de Carpenter y aburriendo con diálogos excesivos que llevan al film a las casi tres horas de metraje, una duración excesiva y rematada por un final caprichoso y abrupto. Al sufrirla, da la sensación de que Quentin pensaba haber escrito un guión mucho mejor de lo que realmente es. No ha sabido desarrollarlo, y no digamos rematarlo.

Otro de los caprichos del geniecillo Tarantino ha sido exigir que la película se ruede en Ultra Panavision 70 mm. Y aunque la fotografía del gran Robert Richardson (también nominado) es fabulosa, no se entiende muy bien este capricho porque en exteriores puede tener su sentido, pero no en los interiores. Y más de dos tercios de la película, que parece más una obra de teatro que de cine, son interiores.

Sé que a estas alturas de su carrera es imposible que Tarantino haga una película que no sea una concatenación de bromas tontas y diálogos supuestamente ingeniosos y eternos, pero debería intentarlo. Alguien (un guionista o un productor con cabeza y poder) debería recomendárselo. Aunque supongo que es ya muy tarde. Quizás si dejase de tener éxito en los cines y sin esa legión de fans modernetes, podría darnos, al menos, una buena película antes de jubilarse.

Otra opción es hacerlo ya. Retírese porque sus mediocres diálogos, sus gruesas bromas y sus descarados “homenajes” (aquí a Carpenter, a Leone, a Ford o a sí mismo) aburren al más pintado.

aurumprod (YouTube)
20 Comments
  1. Wiler says

    Más que una crítica parece un desahogo biliar. Además me temo que el autor ha leído atentamente la crítica de Carlos Boyero antes de escribir la suya y ha querido utilizarla de falsilla pero en plan más malvado

  2. Cobra Verde says

    Muy de tu estilo Regadera, te mofas hasta de Bela Lugosi. Es tu rollo, en tu linea de amargada Boyerista. Pero me caes bien, porque tienes gallardía para decir lo que piensas. Salud!

  3. Dustin Harris says

    Joe Reguera, cada día te tengo más pillao! Esta critica la tienes preparada antes de ver la pelicula. No puedes con el genio de Knoxville, esto huele a envidia insana de un pseudocritico con afán de guionista. Haznos un favor y superalo de una vez!

  4. miesianico says

    Aunque estoy de acuerdo en malditos bastardos, no en Django ni en que se retire uno de los pocos que aún tiene capacidad de hacernos disfrutar. Veremos a ver esta última.

  5. Stratos says

    Me ha encantado que aludas a los productores de Hollywood como standartes de la dignidad cinematográfica. Una prostática crítica. Floja y pobre. Sin reparar en por ejemplo el ejercicio de Samuel L y sus tendencias homosexuales a baja temperatura a modo de tortura. Hay cine en esta película. Por cierto escribe a Lincoln e invierte un poco en tu página. menuda carta de presentación para un ser superior.

  6. Jesucristo Baldwin says

    Los fans de Tarantino sois más hostiles que los de la Pedroche.

  7. Klaus T. says

    Los fans del Taranta se parecen a sus personajes: violentos, descerebrados, tediosos, verborreicos.

  8. Wiler says

    Klaus T. me temo que al escribir tu comentario estabas dictando tu biografía.

  9. Luis says

    Me gustan las críticas de Reguera. No tiene miedo a caer mal y, a diferencia de Boyero, hay argumentos. Y además tiene bastante razón: el cine estadounidense (especialmente el hollywoodiense) es penoso hasta el extremo de la vergüenza ajena.

    En el caso concreto de Tarantino, está bastante claro para todo aquel que no sea un fan terminal suyo que sus pelis son cada vez peores. «Pulp Fiction» entretenía y era algo (un poco) diferente, «Reservoir Dogs» no estaba nada mal y «Jackie Brown» sigue siendo con mucho su mejor peli. Desde entonces pelis cada vez más insoportablemente (y lo que es peor, interminablemente) aburridas y sin gracia. Pero es que Tarantino tampoco es muy buen director, seamos sinceros. Un hombre sin gusto ni la más mínima sutileza, puro kitsch. Que tenga tanto éxito ya es indicativo de la cobardía y falta de ambición de demasiados espectadores.

  10. la novata says

    Ivan Regura se caracteriza por hacer crítica sin mirar a quien. Es su criterio, respetable, como cualquier otro y normalmente no veo que se metan con él, como hacen hoy con esta crítica a Tarantino y sobre todo con la cobardía del seudónimo. Un poquito de educación señores! Que yo también voy a pensar que sus fans son violentos, descerebrados y verborreicos

  11. Enry says

    «lanovata», lo tuyo no es pseudónimo?
    lo tuyo son flores o insultos tabernarios?
    lo tuyo.

  12. Klaus T. says

    Wiler, no, no crea, era la suya. Si se siente aludido, es por algo.

  13. Wiler says

    Pues no, Herr kalus, no me siento aludido, aunque Ud. parece que siente la herida. Y no me siento aludido porque yo no soy nada devoto de Tarantino, me parece un hábil dibujante de comics que en lugar de lápiz utiliza cámaras para sus historietas, pero para nada un director de culto. Eso sí, suele ser brillante con los diálogos. Lo que ocurre es que me producen sarpudillos los críticos pedantuelos, y más, si no son originales y se inspiran en otros críticos no menos pedantuelos, pero más inteligentes.
    Y por supuesto, no soy devoto de Tarantino pero aún menos devoto de los comentaristas tontainas que ante la falta de argumentos, utilizan el insulto.

  14. Wiler says

    Klaus, sorry

  15. El Oooooso Judío says

    Bah, ni caso este es el amargado que escribió un libro en el que pone a parir peliculillas como Vértigo o La Noche del Cazador… esas son sus credenciales cinéfilas. El chapero de Boyero.

  16. Cobra Verde says

    Iván tío desbloquéame en el facebook, echo de menos estas cosas. Me caes bien,vuelve a los Hunters, a tu casa. Queremos publicar tus Reguerías y nos encantaría tenerte con nos. Te lo digo en serio y con todo el respeto ¿eh?

  17. Keyser says

    Pues sí que pica la gente aún: la vi un lunes gélido, a diez días de su estreno, a las siete de la tarde, y el cine (la sala 1 del Verdi) estaba casi lleno. Debe ser que a la gente le sobra tiempo y dinero, en fin. Este hombre es capaz de lo mejor (Kill Bill) y de lo peor (Pulp fiction, quizá la más sobrevalorada de los últimos lustros), pero aquí está como apático, con el piloto automático puesto y sus viejos chistes, peroratas, gags y flashbacks de siempre. Encima, con Tim Roth imitando a Christoph Waltz, no sé si es broma privada o pique entre egos. Ni lo de la carta de Lincoln tiene gracia como macguffin. Quizá lo del retiro sí sería una buena opción. Eso sí, el viejo Morricone, de lujo.

  18. natxoman says

    Entiendo lo del palique y el metraje pero me parece brillante. Y muy bien desarrollada.

  19. mario says

    Lo pero es oir al traductor de Tim roth, incapaz de hacer acentos, ni el inlges con acento aleman para Waltz ni los dos que hace Roth, tan distintos. Es una verguenza su doblaje

  20. mario says

    pesimo doblaje de Roth y tambien de Waltz que hablaba ingles con acento aleman. y Roth hace dos acentos distintos genial y aqui lo chafan con un doblaje atroz

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