Borrell: “En Cataluña no ha habido debate sobre la independencia porque hay una espiral de silencio”

El exministro y expresidente del Parlamento Europeo, Josep Borrell ha publicado, junto con el también ingeniero, Joan Llorach, un libro que ya está en las librerías. Las cuentas y los cuentos de la independencia (Los libros de la Catarata, 2015), en el que tratan de responder a cuatro preguntas sobre el llamado “procès” de secesión liderado por Mas y Junqueras.

Una: ¿Dispondría Cataluña de 16.000 millones con los que evitar recortes? Dos: ¿Es Alemania el modelo? Tres: ¿Sufre Cataluña expolio fiscal? Y cuatro: ¿Apoyaría la comunidad internacional esa independencia?

El resultado es un libro basado en la aritmética de las cifras y que trata de clarificar las razones por las que o bien los aludidos cometen errores o bien directamente se miente más que se habla en las finanzas reales e hipotéticas. Por ejemplo, demuestran cómo las cifras son distintas si se aplica a esas finanzas el llamado “método beneficio” o el “método monetario”, que viene bien explicado en el capitulo 4 –que es el dedicado a desasnar las inocentes mentes en materia fiscal y financiera-, así que mejor no lo explico yo aquí.

El libro no entra en terrenos morales ni emocionales ni de corrupción. Sólo cuenta las cuentas y los cuentos derivados de esas cuentas. cuartopoder.es se ha puesto en contacto con los autores.

– ¿Ha hecho falta este libro para explicar lo de los 16.000 millones?

– JB: No solo para eso, el libro trata de más cosas, pasa revista y desmonta muchos de los argumentos de Mas y Junqueras que no son más que cuentos sin fundamento. Uno de los más gordos no es económico, es político, y consiste en hacer creer que la comunidad internacional reconocería la independencia de Cataluña y que seguiría en la UE.

– JLl: Sólo un libro tiene la extensión que permite explicar los argumentos y sus fuentes de manera que sean consultables por los lectores. Cualquier artículo es fácilmente neutralizado con otro artículo. Cualquier opinión en un programa de radio o televisión es fácilmente neutralizada con otra intervención. El libro se hace necesario especialmente cuando los medios no realizan el análisis de argumentos contradictorios sino que se limitan a facilitar la última réplica a sus afines.

– ¿Por qué han elegido las declaraciones de Mas y Junqueras como modelo y línea de discurso?

– JLl: Porque dan buena idea de los argumentos que conocen los ciudadanos y de lo que han explicado a la comunidad internacional. Además, porque resulta muy ilustrativo comprobar cómo, poco a poco, Mas ha ido haciendo suyo el ideario completo de Junqueras desde una posición inicial de oposición total. A Mas le costó mucho llegar a pronunciar la palabra "independencia".

– ¿Cómo es que los medios de comunicación nacionalistas no han hecho un análisis crítico o un debate de estas cuestiones?

– JB: No ha habido debate porque en Cataluña hay una espiral de silencio y los medios oficiales sólo repiten las tesis oficiales. Pero los que no son independentistas tienen una gran responsabilidad de dejar que esas falsedades se hayan repetido hasta convertirse en certezas incuestionables. ¿Cómo es posible que la sociedad catalana se haya tragado el bulo de las balanzas fiscales alemanas durante años sin que nadie dijera “oiga, dónde están, que nadie las ha visto”?

– JLl: En primer lugar, ningún medio de comunicación reconocería ser nacionalista y en segundo lugar, en España no es corriente analizar críticamente los postulados de los "afines". Ahora mismo, en plena campaña del 27S, es perfectamente predecible el tratamiento que cada medio va a dar incluso a hechos brevísimos y difícilmente interpretables como unas pocas palabras de David Cameron.

– ¿Qué dificultad conlleva explicar a la gente estas cuestiones financieras tan manipulables?

– JB: El libro dedica un capitulo conceptual a explicar qué es y cómo se calcula una balanza fiscal, qué quiere decir “neutralizar” el déficit estatal, por qué se hace, como se hace, qué significan los resultados, etc. Creemos que es imprescindible aprender esos conceptos si se quiere entender el debate. De lo contrario, somos prisioneros de la propaganda malintencionada que ha creado el mito de los 16.000 millones que estarían disponibles con la independencia, y que son tan falsos como las balanzas fiscales alemanas que nunca existieron.

– ¿Por qué parece resultar tan fácil a los nacionalistas maquillar las cifras? 

– JLl: Las cifras en sí no están maquilladas. Lo que ocurre es que se instrumentalizan políticamente tergiversando completamente su significado. Por ejemplo, el déficit fiscal calculado por el método monetario, el popularizado por la Generalitat, es muy poco indicativo del beneficio fiscal de la independencia para la Generalitat. Sin embargo, los políticos nacionalistas identifican los dos conceptos.

– Mencionan a Gustavo Bueno: ("Las formas de nombrar condicionan las formas de pensar") ¿Les parece que los nacionalistas han tenido astucia en su forma de nombrar o directamente han mentido?

– JB: La astucia en las formas de nombrar es una forma sofisticada de mentir. Sí, muchos han mentido porque sabían muy bien de lo que hablaban. Otros, como Junqueras, pueden tener el eximente de la ignorancia, y repetían lo que les convenía sin saber muy bien  el significado de la cifra. Pero pasar de decir que el déficit calculado por un determinado sistema es de 16.000 millones a que ése sería el beneficio fiscal de la independencia es una falsedad.

– Si Cataluña tendría más recursos siendo independiente, ¿qué razones hay para no intentarlo?

– JB: Algunos medios me han atribuido haber dicho que la independencia sería positiva porque aportaría más recursos a Cataluña. Se trata de una manipulación de una expresión utilizada en el contexto de una explicación sobre el déficit fiscal. Si Cataluña tiene, que lo tiene, déficit fiscal con el Estado, cualquiera que sea la cifra, si fuera independiente y por tanto dejara de tener ese déficit, en teoría tendría de repente más recursos fiscales. Pero además ocurrirían más cosas. Una trasformación de esa magnitud no se efectúa ceteris paribus, es decir todas las demás cosas igual. Habría que financiar las estructuras de un  nuevo Estado. Sólo la contracción de las relaciones comerciales con España y la salida de la UE provocarían unos efectos económicos muy negativos que anularían la ligera ventaja fiscal inicial. En el libro explicamos claramente que, al menos en el medio plazo,  la independencia tendría efectos económicos negativos para Cataluña.

– ¿Pasará con Cataluña lo que ha pasado con Quebec y Escocia?

– JLl: Es muy difícil que EEUU, Alemania, Francia, Italia o España permitan un referéndum. A diferencia de Canadá y el Reino Unido, tienen una constitución que estipula su indivisibilidad. Aceptar la divisibilidad de un país, además de ir en contra de sus convicciones, representaría asumir un gran coste electoral a cualquier dirigente político de esos países.

– ¿Qué le ha parecido la comparecencia de Mas ante el Parlament?

– JB: Otro ejercicio de cinismo. Oscurecido por la iniciativa del PP de reformar aprisa y corriendo el Tribunal Constitucional lo que le permite a Mas presentarse como un protomártir y otra vez sacar la bandera para ocultar la cartera

– ¿Necesitaríamos en España la cualidad anglosajona de discutir y debatir sin apasionamiento este tipo de asuntos?

– JLl: Por supuesto. Lo más necesario sería disponer de unos medios con el compromiso de siempre evaluar críticamente a los políticos que en principio son afines a su posicionamiento editorial.

– ¿Llegará este libro a las mesas de noche de Mas y Junqueras?

– JLl: Es más importante que llegue a las mesas de quienes ahora piensan apoyar la independencia, convencidos de que España somete a Cataluña a un régimen fiscal y político excepcionalmente injustos. Como verán en el libro, la situación de Cataluña es completamente comparable a la de las regiones ricas en los países de nuestro entorno.