Estos son los accidentes domésticos más comunes, ¿cómo evitarlos?

Contenido ofrecido por Línea Directa

Los accidentes domésticos son una de las principales causas de muerte en la UE, por detrás de la Covid, el cáncer y las patologías cardiovasculares. Prevenir estos accidentes no es fácil: por mucha precaución que pongamos, siempre puede producirse una situación inesperada que ponga en peligro nuestra integridad. Por eso es importante contratar un buen seguro de hogar.

Los seguros de hogar pueden cubrir los posibles daños personales en un accidente doméstico

Además de proteger las viviendas, determinadas pólizas de hogar pueden cubrir también los posibles daños a las personas como consecuencia de un accidente doméstico. Si la cobertura es amplia y hay contratada una responsabilidad civil, cualquier persona accidentada dentro de la casa estará también protegida.

El seguro del hogar no tiene por qué ser caro, solo hay que buscar, comparar y hacer números. Calcular el seguro de hogar en Línea Directa, por ejemplo, es rápido y sencillo; en solo unos minutos se puede obtener un presupuesto que permita comparar con otras compañías. A partir de ahí, la decisión estará en manos del cliente, aunque siempre es bueno estudiar a fondo las coberturas y dejarse asesorar por expertos.

Pero, ¿cuáles son los accidentes domésticos más habituales?

1.Golpes y caídas

Los hogares están llenos de elementos y situaciones que pueden originar caídas. Suelos resbaladizos, alfombras, escaleras, objetos mal colocados… el riesgo existe y cualquier mal paso puede provocar un buen susto.

Una zona de especial riesgo es el baño; los resbalones en la bañera y fuera de ella están detrás de numerosas fracturas que podrían evitarse con alfombras antideslizantes. También hay que tener cuidado con las puertas, ventanas y cajones abiertos, porque son una fuente de golpes.

2.Heridas por herramientas y utensilios cortantes

Por mucha destreza que tengamos en el manejo de los cuchillos de cocina, siempre pueden deslizarse y provocar un corte. Lo mismo pasa con las tijeras, los cortafiambres y con muchas herramientas de jardín, como los cortasetos o las temidas motosierras. Con este material, toda precaución es poca; hay que utilizar guantes de protección y actuar con los 5 sentidos.

Las máquinas de bricolaje también originan percances, sobre todo entre personas poco habituadas a su uso. Martillazos, cortes, pellizcos… son pequeños accidentes que, en ocasiones, pueden requerir atención médica.

3.Intoxicaciones

Los productos de limpieza constituyen un riesgo importante, sobre todo para la población infantil. Hay que tener guardados a buen recaudo lejías, detergentes y otras sustancias potencialmente peligrosas. La mejor manera de hacerlo es tenerlas en un armario cerrado y de difícil acceso para los niños.

4.Quemaduras

La cocina es una zona de alto riesgo, sobre todo por el peligro de quemaduras. Fogones, hornos, sartenes, líquidos hirviendo… hay múltiples elementos que pueden generar percances. Lo mismo pasa con las planchas, las estufas y las chimeneas.

Hay que evitar el contacto con las fuentes de calor, pero por encima de todo es importante no ir con prisas. Muchas veces, detrás de un accidente doméstico están la precipitación y la falta de atención.

5.Electrocución

Los enchufes, los interruptores y cualquier aparato conectado a la corriente pueden provocar una electrocución, sobre todo si se asocian con agua o humedad. Es importante no manipular los aparatos cuando estamos descalzos o con las manos mojadas y desconectar la corriente antes de intentar cualquier reparación (cambios de bombillas, instalación de lámparas, etc.)

El riesgo 0 en el hogar no existe, pero siempre podrá minimizarse si actuamos de forma consciente.

Leave A Reply